Almeida cambia la ley para que los grafiteros pillados in fraganti eliminen la pintada a cambio de evitar la multa

Operarios municipales limpiando un grafiti en la ciudad de Madrid

El Ayuntamiento de Madrid que dirige José Luis Martínez-Almeida ha aprobado una modificación de la normativa municipal para que aquellos que cometan infracciones relacionadas con la realización de grafitis en la vía pública eliminen las pintadas que han hecho como actividad sustitutoria de la sanción que les ha sido impuesta. Hasta ahora, los sancionados que optaban por realizar una prestación en beneficio de la comunidad como vía alternativa al pago de la multa propuesta realizaban una actividad de limpieza genérica del espacio público y no vinculada directamente con la eliminación de las pintadas. Ahora tendrán que eliminar lo que pintaron. Este cambio ha entrado en vigor el 4 de diciembre.

¿Cómo eliminarán los grafiteros las pintadas que han hecho en la vía pública? Colocando una nueva capa de pintura para cubrir el grafiti. Se actuará únicamente sobre materiales no porosos como ladrillo pintado, enfoscado y muros pintados. Antes de llevarla a cabo, se protegerán las superficies que no vayan a ser objeto de pintado (aceras y otros elementos del mobiliario urbano cercanos) para evitar su ensuciamiento. Se procederá al uso de pinturas homologadas y apropiadas para exteriores. La aplicación de la pintura se efectuará dando dos manos por medio de rectángulos o cuadrados uniformes, buscando ajustar el tono de la pintura lo más aproximado a la original para evitar así la formación de contrastes visuales.

Para realizar la limpieza de lo pintado, se suministrará a cada grafitero sancionado los equipos de protección individual (EPI) integrados por un par de guantes de trabajo con resistencia al corte (anticorte), botas reforzadas, chalecos azul reflectante serigrafiados con ‘Limpio Madrid’ y gorra. Para los días de lluvia, a las personas que vayan a realizar esta actividad se les facilitará chubasqueros, pantalones impermeables y guantes adecuados para el agua. De esta forma, queda garantizado que cada participante cuente con los elementos necesarios que garanticen su seguridad en materia de prevención de riesgos laborales.

La Ordenanza de Limpieza de los Espacios Públicos, Gestión de Residuos y Economía Circular incluyó en su artículo 99 la posibilidad de sustituir las sanciones económicas por medidas alternativas en beneficio de la comunidad. Desde entonces, es frecuente que las personas sancionadas soliciten la realización de prestaciones de limpieza en vías públicas en lugar del pago de la multa propuesta. El hecho de que desde 2016 se hayan realizado 6.000 actuaciones demuestra la buena acogida de estas iniciativas.

Cambio en la ordenanza

Pero el Área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad ha decidido ahora modificar el protocolo tras la experiencia adquirida en estos últimos años a la hora de afrontar el fenómeno de las pintadas en la vía pública, unido a la creación de la denominada ‘patrulla antigrafitis’. La voluntad del Ayuntamiento de erradicar este tipo de conductas que atentan contra el patrimonio y el paisaje de la ciudad aconseja que la prestación que puedan llevar a cabo los sancionados esté enfocada precisamente a la eliminación de grafitis y no a la limpieza genérica del espacio público, como hasta ahora se venía produciendo.

En lo que va de 2024 (hasta el 2 de diciembre), el Ayuntamiento ha tramitado 361 expedientes sancionadores por pintar grafitis en la vía pública. Almeida y su equipo han dado importancia a la eliminación de estas pintadas, a las que consideran vandalismo. Famoso es ya el video en el que el actual alcalde intenta, sin mucho éxito, limpiar un grafiti durante la campaña electoral de mayo de 2019. En septiembre de 2022, el Gobierno municipal creó dentro del Servicio Público de Limpieza Urgente (SELUR) un equipo especializado en la limpieza de pintadas. Desde entonces se han prestado 146.108 servicios por parte de estas patrullas y la superficie total limpiada es de 2.419.951 metros cuadrados.

Agentes de la Sección de Protección del Patrimonio Urbano de Policía Municipal (Sepropur) examinando un grafiti en el distrito Centro (Foto: Helena Margarit)

Un año más tarde, en noviembre de 2023, Almeida creó una unidad especial en la Policía Municipal para combatir a los grafiteros que ensucian la ciudad. Se llama Sección de Protección del Patrimonio Urbano de Policía Municipal (SEPROPUR) y está formada por 39 agentes que trabajan las 24 horas en tres turnos todos los días del año pateándose los 21 distritos de la capital. En un año se ha saldado con unos resultados operativos muy positivos: 264 expedientes, 384 denuncias, 42 investigados y casi 700 identificados, 200 vigilancias, 117 atestados remitidos a juzgados de instrucción y nueve a la Fiscalía de Medio Ambiente por delitos de daños a edificios protegidos o de interés cultural.