La modelo y ex Miss Colombia en 2017, Laura Barjum estuvo en una entrevista con Los impresentables, de Los 40 Colombia, en donde dio algunos detalles de su vida privada y aprovechó para confesar por qué tuvo que cambiar su nombre real.
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Laura confesó en medio su intervención que tuvo que cambiar su apellido para poder marcar una diferencia en el mundo del entretenimiento, cuando hizo su primer casting a los 16 años y notar que su nombre completo era muy común.
La también presentadora aclaró para Los 40 que en realidad se llama Laura González Ospina y detalló de donde sacó su apellido de modelo.
“En el primer casting que hice chiquita cuanto llegué a Bogotá, a los 16 años, yo me acuerdo de que llamaron a la siguiente y dijeron ‘Laura González’, pero dijeron que no era yo, éramos como tres Laura González en la sala, me quedé como traumatizada con eso y probamos otros apellidos, hasta que llegamos al Barjum, que es el apellido de mi abuela paterna”, explicó.
Además, Laura explicó que el apellido el libanés, por lo que lo consideró una buena idea para poder hacer la diferencia en el mundo del entretenimiento, lo que aseguró que le ha funcionado.
“Mi papá fue el que me dijo que usara el Barjum, nadie lo usaba y es un apellido raro… Somos de ascendencia libanesa, tengo un bisabuelo libanés y se quedó así, pero yo no aparezco así en la cédula”, dijo.
Las razones por las que Laura sufrió de bullying al entrar al mundo de las modelos
Pese a la belleza que la logró llevar a Miss Universo en 2017, Laura confesó que cuando entró al mundo de las modelos y las reinas, era criticada por el lunar que tiene en el rostro y su altura.
“Si pensé en quitármelo, pero mis papás no me iban a dejar, y además cuando fui señorita Cartagena no era muy popular en las encuestas por el lunar, me decían que tenía esa verruga en la cara y que me reía raro y me decían que estaba gorda”, explicó
Laura aclaró que ella tiene fotos de su paso por el reinado de Cartagena y asegura no haber estado gorda, sino que se trataba de comentarios que hacían desde el odio para desestabilizarla.
“Pero más que los comentarios del cuerpo, hablaban mucho de la verruga y en ese momento pensé que los compañeros del colegio tenía razón, pero en ese momento conocí a mi preparador de reinas y él me dijo que ese lunar era mi marca como Cindy Crawford o Adriana Arboleda”, comentó la presentadora.
El empoderamiento por parte de su preparador funciono y le dio la confianza de pararse en las pasarelas, al punto de convencer a la prensa de que ese defecto en realidad era su marca personal.
“Los comentarios que empecé a escuchar eran positivos para mi Lunar, y me di cuenta de que esas personas de los reinados y los periodistas realmente sí sabían de marca”, explicó
También tuvo inseguridades con su cabello
Recientemente, la modelo ha dejado ver desde sus redes sociales que realmente su cabello siempre ha sido rizado, sin embargo, confesó para Los 40 que la fama la conoció con otro look porque desde los 14 años sentía inseguridad con sus crespos.
“En el reinado fui yo la que no permití que la gente supiera que yo soy crespa… me hice mi primer alisado como a los 14 años, y cuando veía que me salía raíz, corría a la peluquería o me planchaba súper brusco”, dijo.
Fue hasta hace tres años que Laura tomó la decisión de dejar crecer su cabello natural y lucirlo, sin embargo, aclaró que todo se dio porque olvido llevar su plancha para un paseo y tuvo que dejar su inseguridad.