Cortes de luz: alertan por el alto consumo previsto para el jueves

Cammesa, la administradora mayorista del sistema eléctrico, advirtió que la temperatura de esta semana puede provocar algunas interrupciones en el suministro de luz. “Se espera que el jueves la temperatura alcance picos de 36 grados. Esto, por distintos efectos, estresa el sistema”, según Edgardo Volosin, director ejecutivo de Edenor.

Aunque “ha habido temperaturas más altas”, la confluencia de varios aires acondicionados prendidos a la vez en el mismo hogar provoca trastornos en el sistema eléctrico.  “El calor supuestamente va a arrancar de manera creciente, se espera que el jueves alcance picos de 36 grados”, explicó el ejecutivo.

“Hay un efecto que se está produciendo que es la simultaneidad en el uso de aire acondicionados. En una casa hay entre 3 y 4 aire acondicionados prendidos en forma simultánea. Eso es pernicioso para el sistema”, explicó Volosin.

“La demanda de energía crece en forma constante todos los años, a razón de un 3% anual, y esto se sostuvo durante décadas. Hay necesidad de abastecer mucho más la demanda y dotar (al sistema) de transporte más confiable”, detalló.

Para esta época, son habituales las importaciones de electricidad con Brasil. Argentina suele requerir en períodos de alta demanda -como el verano- y luego lo devuelve durante el resto del año.

La situación de varios aires acondicionados prendidos a la vez es una situación poco frecuente en los tejidos urbanos. En las principales ciudades europeas, por ejemplo, hay una o dos unidades por vivienda. Hay regulaciones que impiden la instalación de mayor cantidad de equipos.

Aunque el Gobierno y las empresas siguen con la guardia en alta frente a posibles interrupciones del suministro eléctrico, un informe reciente de Cammesa -la administradora mayorista del sistema, con control estatal- trajo cierto alivio.

 Cammesa difundió uno de sus habituales informes de programación, que trajo cierto alivio de cara al período febrero-abril de 2025.  Y allí sostiene que la demanda eléctrica será menor que la media histórica. Buenos Aires y sus alrededores sería una de las zonas en las que habría menos consumo, por cierto caudal de lluvias.

La administradora suele advertir que sus informes pueden contener errores, ya que se hacen en base a estimaciones de especialistas en clima. En este caso, se hacen eco de un informe de International Research Institute (IRI) for Climate & Society, un referente en cuestiones de temperatura.

IRI proyecta un escenario bastante “normal” para el período febrero-abril de 2025. Es decir que las temperaturas tendrían el mismo comportamiento histórico, sin picos de calor por encima de lo normal.

Por debajo de la media histórica

El consumo eléctrico nacional se ubicaría en un 2,7% por debajo en relación a la media histórica. La caída sería más fuerte en la provincia de Buenos Aires (incluye la ciudad de Buenos Aires y el conurbano), con un retroceso del 3%.

En el interior, la demanda aflojaría en un 2,4% en relación a la media “histórica”.

Los distribuidores -los que llevan electricidad a los hogares y comercios- registrarían una caída en su demanda del 3,6%, mientras que las grandes industrias consumirían un 3,6%, según la estimación de Cammesa.

De todas formas, los grandes consumidores representan apenas un 10% de la demanda. El 90% es por las distribuidoras.

El calor, por zonas

En un mapa que muestra toda la Argentina, la mayoría del país parece encaminarse -según esta predicción- a una temperatura “normal” para estos meses. Solo habría posibilidades que el termómetro se comporte un 40% por debajo de lo esperado en algunas zonas de Tierra del Fuego, Santa Cruz, Mendoza, San Juan y algunos bolsones de Buenos Aires, Santa Fe y Entre Ríos.

En una segunda foto, casi la mitad del país (del centro al norte, pasando por Buenos Aires y con pico en Chaco) experimentaría un escenario de más lluvias que lo normal, lo que suele ser positivo para el sistema eléctrico. En cambio, del centro hacia al sur, podría haber más calor, pero las posibilidades son entre bajas y medianas.

De todas formas, el Gobierno mantendrá la posibilidad de importar excedentes de Uruguay, Brasil y Bolivia. Las necesidades de gas estarían cubiertas sin recurrir a importaciones.