Argentina en Colombia se mostró confundida por contradicción idiomática que se utiliza en el país: Cómo así que un “poco e’ gente” es mucha

Micaela solo entendió la frase hasta que la escuchó en un pódcast sobre infidelidad  - crédito @micaelasposetti / TikTok

Pese a hablar la misma lengua, los modismos crean barreras entre hispanohablantes que bien podrían dificultar la conversación de un Colombiano y un argentino, por ejemplo.

Un ejemplo de ello es la frase que utilizan los colombiano y que durante meses confundió a la migrante y creadora de contenido argentina Mi Micaela Posetti.

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Según dijo en un video compartido a través de su perfil en la plataforma Tiktok, “los colombianos tienen una expresión muy rara, pero muy rara, y es que cuando van a hablar de algo en cantidad, cuando quieren decir que en cierta situación había mucho de algo, por ejemplo, si van a un concierto con mucha gente, no dicen que estaba lleno de gente o hasta el cul@ de gente –como diríamos los argentinos– sino un poco de gente”.

Según dijo en un video compartido a través de su perfil en la plataforma TikTok, “los colombianos tienen una expresión muy rara, pero muy rara y es que cuando van a hablar de algo en cantidad, cuando quieren decir que en cierta situación había mucho de algo, por ejemplo, si van a un concierto con mucha gente, no dicen que estaba lleno de gente o hasta el cul@ de gente –como diríamos los argentinos– sino un poco de gente”.

Solo hasta que escuchó la expresión en un contexto evidente supo que se trataba de un modismo, con algo de ironía o sarcasmo, que los colombianos adaptaron para referirse a cantidad o multitud:

¿Un poco de gente? Un poco de gente es mucha, yo ya la había escuchado un millón de veces, pero me cayó la ficha en un podcast en la que a una chica le llegó un mensaje diciéndole que su esposo estaba con un poco de prepagos y, claramente, no eran pocas, sino muchas”, explicó, en un intento por aclarar las dudas sobre su uso a otros migrantes en Colombia.

Por frase “de hoy en ocho” Colombiana estuvo a punto de perder su trabajo:

La frase “de hoy en ocho”, comúnmente utilizada en Colombia, le habría ocasionado un problema en el trabajo a la creadora de contenido argentina Camilups.

El incidente ocurrió en su lugar de trabajo, cuando le indicaron que una tarea debía ser revisada “de hoy en 8″. Al ser lunes, Camilups asumió que la revisión tendría lugar el martes de la semana siguiente. Sin embargo, al llegar el lunes siguiente, sus compañeros le preguntaron por el avance de la tarea, lo que “la dejó fría”.

La creadora de contenido explicó que, en su interpretación, “de hoy en 8″ significaba ocho días después del día actual, lo que la hizo pensar que la fecha indicada era el martes.

La confusión llevó a Camilups a reflexionar sobre la lógica detrás de esta expresión y a compartir su experiencia en redes sociales, donde planteó preguntas a sus seguidores colombianos, como: “Si quieren decir la próxima semana, ¿por qué dicen ‘de hoy en 8′, cuando en realidad no son ocho días? Lo que ustedes quieren decir es ‘de hoy en 7′, si es lunes, así se revisa el próximo lunes”.

Además, la creadora de contenido comparó esta expresión con otra frase común en Colombia: “de hoy en 15″. Según explicó, esta última también le resultaba confusa desde un punto de vista matemático, ya que, bajo la lógica de sumar días, “8 más 8 son 16, entonces sería ‘de hoy en 16′”. Estas observaciones generaron un debate entre sus seguidores, que, de una u otra manera, intentaron explicar el origen y el uso de estas expresiones en el contexto colombiano.

Camilups tuvo una discusión con uno de sus compañeros de trabajo sobre cuándo se cumplían los ocho días - crédito @camilupss / TikTok

Uno de ellos, incluso, hizo el conteo, haciendo la salvedad de que “cuando es de hoy en ocho, los colombianos suman el día que está transcurriendo a la cuenta”, y, por tanto, el trabajo de Camilups debía ser entregado en lunes: “De hoy en 8: Hoy lunes (1), martes (2), miércoles (3), jueves (4), viernes (5), sábado (6), domingo (7), próximo lunes (8)”.

Esta forma de contar los días, aunque lógica para los hablantes nativos, puede resultar confusa para quienes no están familiarizados con el modismo. Como es el caso de Camilups.