Quito, 7 nov (EFE).- Investigadores de la Fundación Charles Darwin (FCD) y del Parque Nacional Galápagos informaron del primer registro confirmado de un tiburón blanco (Carcharodon carcharias) en aguas ecuatorianas, un “avistamiento histórico” que se ha producido a unos noventa kilómetros de la Isla Wolf, que forma parte del archipiélago de Galápagos.
Se trata de “un hallazgo inusual en la región del Pacífico Este Tropical, donde la presencia de tiburones blancos, en localidades más al sur de las costas de México, es excepcionalmente rara”, indicó la FCD este jueves en un comunicado.
El avistamiento tuvo lugar el 3 de noviembre de 2021 cuando, a bordo de un barco atunero industrial, el tripulante y co-autor del estudio que documenta este encuentro, Sergio Zanchi, observó a un tiburón blanco hembra adulto.
La Fundación explicó que la presencia de esta especie en esa zona está, presuntamente, relacionada con las condiciones oceanográficas resultantes de La Niña en 2021, un evento climático en donde las aguas del Pacífico Este son inusualmente frías y que habría favorecido la migración de este individuo hacia aguas ecuatorianas.
Pelayo Salinas-de-León, autor principal del estudio, comentó que “contar con la presencia transitoria de uno de los animales más formidables que surcan nuestros océanos y una especie clave para la salud de los ecosistemas marinos, es motivo de celebración para la biodiversidad del país”.
Por su parte, Jenifer Suárez, directora de Ecosistemas del Parque Nacional Galápagos y co-autora del artículo científico, calificó este primer registro confirmado de un tiburón blanco en aguas ecuatorianas como “un hallazgo significativo para la investigación y conservación marina”.
Además, Suárez recordó el valor de las Reservas Marinas de Galápagos y Hermandad como refugios esenciales para la biodiversidad, “especialmente para depredadores que cumplen un rol fundamental en el equilibrio de los ecosistemas marinos”.
En Galápagos, la presencia de tiburones es un indicador clave de la salud del entorno marino, anotó la Fundación, que explicó que lejos de ser una amenaza para las personas, estos depredadores contribuyen de manera esencial al equilibrio oceánico.
El tiburón blanco es una especie que habita comúnmente en aguas frías o templadas, como las de Sudáfrica, Australia, la costa Pacífica de California y México, o en el Atlántico Norte, indicó la Fundación.
El rol de esta especie es crucial para mantener el equilibrio de los ecosistemas marinos pues ayuda a prevenir la sobrepoblación y a mantener una condición saludable en las especies de las que se alimenta.
El tiburón blanco está catalogado como “vulnerable” por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), ya que enfrenta graves amenazas, como la pesca incidental, la caza furtiva para la venta de mandíbulas y aletas, la pérdida de hábitat y la disminución de sus fuentes de alimento.
El archipiélago de Galápagos, situado a unos mil kilómetros de las costas continentales ecuatorianas, es conocido por su rica biodiversidad, y fue declarado en 1978 como Patrimonio Natural de la Humanidad por la Unesco. EFE
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