El Gobierno eliminó esta semana las retenciones de IVA y Ganancias para el pago con medios electrónicos y tarjetas en comercios. La medida es la primera de las que el ministro de Economía, Luis Caputo, llevará a cabo en los próximos 30 días para reducir “significativamente el costo argentino”.
Operadores de servicio de pago y cámaras de consumo destacan que la medida impulsará la regularización, dinamizará el consumo y dará un ligero impulso a la baja de la inflación, pero piden que las provincias imiten la decisión de Nación.
Como viene el consumo
El anuncio se da en el marco de caídas generalizadas del consumo: según Scentia, las compras en autoservicios cayeron 16,1% en julio y en el año suman un derrumbe de 9,6%. En paralelo, Indec informó que las ventas en supermercados cayeron 7,3% interanual en junio y acumularon una baja de 11,6%.
También según Indec, los pagos realizados con tarjeta de débito subieron 245,5% interanual, por abajo de la inflación para el mismo período (271%), mientras que tarjetas de crédito (331,7%) y otros medios de pago (388,5%) lo superaron ampliamente. En el mismo sentido, First Capital Group informó que las operaciones con tarjeta de crédito subieron 16,9% en julio contra el mes anterior.
Guillermo Barbero, socio de First, explicó a El Cronista que esto ocurrió a raíz de la oferta de ventas en cuotas fijas o con tasas bajas porque “en la medida en que ven que la inflación baja o está controlada, están dispuestos a financiar”. Esto además alimenta a la demanda ya que “cuando tenes cuotas, podes comprar cosas más grandes que ahora podes pagar financiado, porque hay bienes para los que no hay sobrante del presupuesto familiar que alcance”.
La medida
La eliminación de la retención de IVA y Ganancias originalmente estaba pensada para incluir a los pequeños contribuyentes y operaciones menores. El Gobierno decidió ampliarla y suprimir la retención de estos tributos, que no significa en sí misma una baja de impuestos, pero que en general se traducía en un crédito fiscal que luego no era ejecutado. Regirá desde el 1 de septiembre.
El exsecretario de Política Tributaria, Roberto Arias, explicó en sus redes sociales que la medida solo elimina las retenciones que le descuenta al comercio el procesador de tarjeta o de billetera virtual a cuenta de Ganancias e IVA. Se mantienen aún las retenciones del régimen general.
Barbero destacó que la decisión se dio en un escenario en el que muchos comercios no estaban registrando ganancias a raíz de la caída del consumo, por lo que representaba una contradicción.
Los efectos sobre precios, consumo y costos
Arias señaló que esto podría tener un impacto en la reducción en la inflación porque representa un menor costo asociado a los medios de pago, aunque estima que será marginal.
Emiliano Porciani, jefe de negocios de Payway, consideró que esperan una dinamización de los pagos electrónicos y digitales y que la resolución es un avance importante “para igualar los pagos con tarjeta a los pagos en efectivo, con los que no hay retenciones ni percepciones”.
Barbero agregó que es difícil estimar el impacto sobre el precio final, pero que pueden superar el 10% sobre el total, y por eso se daban los descuentos en efectivo, que arrojaban un neto menor pero liquidez inmediata y agregó: “Se suman las comisiones de las tarjetas, que no se elimina, e Ingresos Brutos”.
Sobre el efecto en precios, Barbero consideró: “Va a dinamizar el consumo, pero no sé si efectivamente va a bajar precios. Quizás motive que haya más cuotas sin interés, que en vez de bajar precios se ofrezcan más cuotas”.
La Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) señaló que tendrán menores costos financieros y administrativos asociados y agregó que servirá para reducir la evasión. En el mismo sentido se expresó la Cámara Argentina Fintech (CAF), que ve en la medida un incentivo para ir hacia una Argentina “en la que la industria financiera apalanca el crecimiento de la economía real y formaliza la actividad”.
La Coordinadora de la Industria de Productos Alimenticios (COPAL) dijo que esto va a “favorecer la actividad comercial, liberar capital de trabajo, promover la formalización y reducir la carga financiera” que enfrentaban los comerciantes con el pago a cuenta.
El presidente de la Asociación de Bancos de Argentina (ABA), Claudio Cesario, agregó que es una medida que reclamaban y que “no se aplicaba porque se priorizaba la recaudación” y que de ahora en más se ahorrará el costo de administración y gestión de billetes.
Las provincias en la mira
El consenso de las cámaras empresarias se alineó con lo planteado por el Gobierno y reforzaron el pedido a las provincias para que imiten el anuncio de Nación y recorten las tasas que aplican sobre las operaciones, en particular ingresos brutos y demás tributos locales.
Arias opinó que probablemente las jurisdicciones subnacionales no hagan nada: “Las que administran bien los regímenes (no crean Saldos a Favor excesivos) seguirán así, no necesitan cambiar nada. Los que los administran mal, no están con ganas de coordinar ni adherir a una decisión nacional”.
ABA se sumó al pedido de adhesión de las provincias para eliminar el “impacto distorsivo en la actividad comercial y financiera” de los tributos para impulsar “el crecimiento sostenible de la economía”.
En el mismo sentido, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), se sumó al reclamo y dijo que trabaja con los gobiernos para que las agencias de recaudación “eliminen la retención a los Ingresos Brutos en cada una de las liquidaciones de tarjetas de débito y crédito”.
Las cámaras también sumaron un pedido a la Nación: reducir la presión tributaria “que se encuentra en torno al 40% en los alimentos y el 50% en las bebidas”, según Copal.