Crece la corrida al dólar en Brasil y se extiende a todos los países emergentes

Cuando todo parecía indicar que el 2024 iba a culminar con los precios de los activos en nuevos máximos, Brasil está aguando la fiesta en emergentes.

A este súbito clima negativo se sumó la Reserva Federal con declaraciones de su titular Jerome Powell condicionando futuras bajas de las tasas, lo que gatilló caídas de 3% en los indicadores de Wall Street.

Al cierre, las acciones argentinas en Nueva York mostraron fuertes caídas, de 8% en promedio con bancos liderando las mayores bajas.

¿Se convertirá Brasil en un cisne negro para los mercados emergentes? La realidad es que nadie en las mesas de dinero de emergentes se anima a decir que “lo peor ya pasó”.

¿Se convertirá Brasil en un cisne negro para los mercados emergentes? La realidad es que nadie en las mesas de dinero de emergentes se anima a decir que “lo peor ya pasó”.

El dólar llegó a 6,30 reales con la moneda brasileña perdiendo 24% en el 2024. La crisis cambiaria se extendió a la Bolsa de San Pablo con el Bovespa perdiendo 3,15%. 

El precio de los seguros contra un default en Brasil están subiendo, reflejando el mayor nerviosismo existente y alcanzaron un máximo en 15 meses. Crece la preocupación no por la magnitud de la deuda brasileña, menos del 100% del PBI sino por los intereses anuales que se llevan 5% del PBI. El rendimiento de los papeles del Tesoro brasileño trepó de 10% al 14,5% en este 2024, acrecentando el costo financiero del país.

El impacto en emergentes se hizo sentir a pleno, un mix entre las noticias que llegaban de San Pablo y las que provenían de Washington, sede de la cumbre de la Reserva Federal.

El paquete impositivo de Lula avanza pero el problema es su diseño, con impuestos a multinacionales. Las embestidas oficiales al banco central completan un panorama muy complejo y al mismo crea desánimo entre inversores por una pronta solución a esta crisis financiera en el país vecino. 

El impacto en emergentes se hizo sentir a pleno, un mix entre las noticias que llegaban de San Pablo y las que provenían de Washington, sede de la cumbre de la Reserva Federal. Las monedas de países emergentes cayeron en promedio 0,8%. A última hora se conoció la decisión del Banco Central de Brasil de salir a licitar dólares y así buscar frenar la caída del real.

Impacto cambiario

En la Argentina el impacto también se sintió en la plaza cambiaria. El dólar libre cerró a $1.205 con alza de 3,43%, el CCL lo hizo a $1.158 con alza de 0,2% mientras que el MEP lo hizo a $1.131 trepando 0,2% pero el BCRA intervino en este mercado bajándolo desde $1.165.

El riesgo país se mantuvo indemne al clima en Brasil y cedió otro 2% a 658 puntos.

El festejo íntimo del Gobierno, un nuevo cambio en la Ciudad y el dilema del PRO

“La reciente caída de los precios en todos los ámbitos plantea dudas sobre hasta dónde puede llegar la corrección. Hemos estado escuchando a inversores comparar la situación actual con el escenario entre 2015 y 2016. La comparación es válida no solo por los movimientos de los precios, sino también porque la dirección de la política es similar”, destacó el último informe del JP Morgan sobre Brasil.

“Cabe señalar también que tiene ahora (Lula) un índice de aprobación más bajo que el que tenía su predecesor después de dos años en el cargo y también una aprobación mucho más baja que la de sus dos primeros mandatos” (JP Morgan)

“La popularidad del Presidente ha ido cayendo mientras que su rechazo va en aumento. Los que piensan que Lula es bueno o muy bueno son ahora el 35% de la población, en comparación con el 38% al inicio de su mandato. Más importante aún es que el rechazo al Presidente ha aumentado del 29% al inicio de su mandato al 34% ahora, un 2% más desde octubre. Cabe señalar también que tiene ahora un índice de aprobación más bajo que el que tenía su predecesor después de dos años en el cargo y también una aprobación mucho más baja que la de sus dos primeros mandatos”, destaca el banco de inversión norteamericano.

¿Qué puede pasar en las siete jornadas que restan para cerrar el 2024? Predomina la cautela.

El año fue muy dulce y la tendencia es a desensillar hasta que aparezca el sol en Brasil. Por el momento la oscuridad es total y cada jornada representa una batalla.

El carry trade murió súbitamente. Hay heridas y el dólar puede despertarse y salir de su letargo.