Cuál es el único barrio porteño elegido entre los más cool del mundo y cuánto cuesta un departamento

Cada año, la revista Time Out elabora la clasificación anual de los barrios más cool del mundo. Chacarita había sido elegida en el puesto 34 en el 2022 y este año mejoró 11 lugares y se ubicó en el puesto 23.

Un dato no menor es que fue el único barrio argentino. El primer puesto fue para Notre Dame du Mont (Marsella, Francia) y Mers Sultán (Casablanca, Marruecos) en el segundo lugar.

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El ranking busca reconocer a los rincones más singulares y emocionantes de las ciudades del mundo, y todas sus peculiaridades. “Son lugares que reflejan lo mejor de sus ciudades: su cultura, espíritu comunitario, vida nocturna, comida y bebida, todo condensado en un distrito vibrante y transitable”, explica el artículo. Una definición que. tal vez explique, por qué la movida gastronómica del barrio porteño fue clave.

Una tienda de suministros para pastelería

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La transformación de Chacarita

Quienes desembarcan en la ciudad quizás desconocen que muchos de los barrios que hoy están repletos de negocios, propuestas culturales y ofertas gastronómicas tenían antes una impronta y públicos distintos. Para muchos que hoy frecuentan esos lugares es difícil imaginarlo. Los vecinos más antiguos, en cambio, saben que la foto no siempre fue así. Son testigos de la transformación y vieron, por ejemplo, el nacimiento de la última cervecería de moda donde alguna vez funcionó un taller o la llegada de un imponente edificio de viviendas en el mismo lugar en el que hubo una fábrica.

La revista británica señala que aunque el barrio alguna vez “fue conocido como el hermano menor y menos conocido del vecino Palermo, el barrio más grande y concurrido de la ciudad, Chacarita hoy es un destino por derecho propio”.

Los murales pintados sobre el muro exterior del cementerio, en la avenida Jorge Newbery y pasaje Rodney

Efectivamente, Palermo y su otro vecino Colegiales fueron desdibujando sus límites y generando un efecto derrame sobre otros barrios, como Chacarita. Una de las zonas, donde se cruzan las tres fronteras fue bautizada por algunos como Chacalermogiales, una confluencia en la que se borran sus límites para integrarse y conformar un ícono de la vida porteña. “Chacharita en el último tiempo disfruta del contagio de sus vecinos; si estás cercano a zonas de buen valor inmobiliario, sos más proclive a recibir influencia o derrame positivo de otras”, comparte José Rozados, director de Reporte Inmobiliario.

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La transformación y el crecimiento de Chacarita se aceleró a partir de 2011, cuando se aprobó la creación del Distrito Audiovisual, que abarca a la Paternal, Colegiales, Chacarita y Villa Ortúzar, lo que propició la llegada de empresas de esa industria y puso a girar la rueda: desembarcaron nuevos comercios y proyectos de viviendas.

Esa oleada, que ahora se expande hacia Chacarita y Colegiales, tuvo su puntapié inicial en la elevación de la traza del ferrocarril San Martín. Esos cambios difuminaron las fronteras de los barrios e impulsaron el avance progresivo de nuevas construcciones.

Los desarrolladores más osados vislumbraron un cambio importante y decidieron apostar por la zona. Por ejemplo la apuesta que hace la desarrolladora InArch, la empresa que construye un emprendimiento de US$15 millones de inversión donde confluyen Arévalo, la avenida Dorrego y Córdoba: “Chacalermogiales es un lugar con gran potencial en la ciudad de Buenos Aires, que ha evolucionado rápidamente, ofreciendo un equilibrio entre la vida urbana moderna y un entorno barrial más tranquilo”, comparte Anabela Santos, directora de la desarrolladora, y agrega: “La gente busca esta zona principalmente por su ubicación estratégica, que combina cercanía al Distrito Audiovisual y a los principales polos gastronómicos y culturales de la ciudad”.

InArch avanza con la construcción de Nodo Dorrego, un edificio de nueve pisos en Arévalo y Córdoba, con dos niveles destinados a amenities, que se terminará de construir en diciembre de 2026. “Es un proyecto con monoambientes desde los 34 m² y un ticket que arranca en US$90.780. También contará con dos ambientes con valores de pozo entre US$143.663 y US$205.338. Mientras que los tres ambientes tienen un ticket aproximado de US$310.650. Por último, los cuatro ambientes se venden por un ticket entre US$379.717 y US$ 427.717″, detalla la desarrolladora.

“Quienes antes buscaban en Palermo Hollywood como un lugar canchero para vivir, ahora indagan en otras zonas que son el desborde natural de ese barrio”, comparte Agustín Walger, director de Lepore Propiedades, la inmobiliaria que vende otro de los proyectos que se construyen en una de esas cinco esquinas. El broker explica que se trata de un fenómeno que hace tiempo ocurre en otros barrios: “Villa Urquiza viene empujando hacia Chacarita o Belgrano para el lado de Colegiales, todos haciendo emprendimientos que apuntan a mantener la continuidad en la calidad constructiva”.

El proyecto que Walger comercializa en esta zona es Dorrego Place, un edificio ubicado en Chacalermogiales que tendrá 11 pisos y que se estima que estará listo para febrero de 2026. Sumará un total de 38 unidades, que van de monoambientes de 33 m² por un ticket que arranca en US$82.000 en pozo, hasta dos ambientes que parten de los 45 m² y alcanzan los 53 m² por un ticket desde US$105.000, también en pozo. Además, contará con una planta baja comercial de 150 m² y dos últimos pisos con amenities.

“El precio del m² se ubica en US$2350, aunque estimamos que por disposición, proyecto, producto, ticket y zona se puede revalorizar a mercado de hoy a US$2800/2900″, asegura Walger y señala que promete una renta del 5% a 6%, para aquellos que lo compren para volcar al alquiler. El dato revelador es que, a pocas cuadras, hay proyectos que se construyen en pleno Palermo Hollywood y que se ofrecen desde el pozo a US$3000/m². Se tratan en definitiva, de una diferencia de más del 20%.

Todo esto llevó a que, donde algún día ploriferaron talleres mecánicos, hoy florecen bares, restaurantes, vermuterías y cafés, tiendas de ropa de diseño, librerías y barberías. Las bicicletas copan la escena, en las plazas y en las veredas se respira un aire joven y canchero entre los clásicos murales pintados en las fachadas. Sin dudas, es una de las zonas porteñas que más se transformó.

El imponente edificio del Banco Galicia fue una apuesta fuerte por parte de la entidad en el barrio de ChacaritaAnchoita, una de los favoritos del barrio, que tiene lista de espera para las reservas

La publicación británica resalta que su centro gastronómico ha cobrado un gran auge, especialmente en torno a la Avenida Jorge Newbery. Subrayan la presencia de varios atractivos que concentran la atención como la “neo-pulpería” Abreboca, el café Jungla Café y Plantas, las joyas contemporáneas de Nadine Zlotogora y Falena, una librería a puerta cerrada donde se puede acompañar una lectura con un vino o un café en su patio. También sugieren la cocina de campo argentina de Abreboca, ApuNena para tapas asiáticas, Na Num, recomendado por Michelin, para comida coreana no tradicional. Por último, animan a hacer una visita por El Galpón de Guevara, para disfrutar de una actuación de teatro independiente.

“Siempre vale la pena asistir a alguna de las actuaciones y fiestas que se celebran en el centro cultural C Complejo Art Media”, señala el artículo de Time Out.

Por qué los desarrolladores eligen a Chacarita para construir

Chacarita se convirtió es un barrio que despertó el interés de desarrolladores, especialmente en avenidas como Federico Lacroze, algunas zonas de Álvarez Thomas y de Córdoba, que son las que permiten mayor edificación en altura.

Frente a la pregunta de por qué los inmobiliarios ponen el ojo en la zona, Rozados responde que se debe a que “hay muy buena conectividad, a partir de las avenidas y de los corredores que conectan muy bien con toda la ciudad y, sobre todo, una oferta de tierra, de lotes grandes, a un valor que se considera razonable dentro de un barrio que tiene atracción comercial para la venta”. El experto asegura que, además, cuenta con valores de incidencia de tierra más bajos que sus vecinos, “está entre un 30/40% por debajo a Palermo, Colegiales y Belgrano”.

El barrio defiende un valor del metro cuadrado para la venta que se ubicó en US$2512 en agosto, según datos de Zonaprop. Se trata de un precio casi un 22% por debajo de su vecino Palermo. Por su parte, los alquileres en este barrio premiado se ubicaron en agosto en $520.274.

De todas formas, Rozados explica que no se trata de un barrio homogéneo, ya que, si bien hay lugares que generaron un polo gastronómico concurrido, “hay sectores como la zona del cementerio de Chacarita o la Avenida Warnes, que están lejos de ser considerados como cool, explica el director de Reporte Inmobiliario.

Otro punto fuerte es su conectividad y accesos. “Está cerca del corredor norte, y su creciente atractivo se debe en parte a las mejoras en la infraestructura y la conectividad, lo que ha despertado un considerable interés entre desarrolladores y compradores”, agrega Santos. Se refiere a que hace tres años se eliminó el puente de la avenida Juan B. Justo, que sobrevolaba el corredor Córdoba y, de alguna manera, aislaba a los dos Palermos: el Soho del Hollywood. Hoy ambos están integrados, incluso con Chacarita. Este beneficio “atrajo la mirada de un público joven, parejas que adquieren primera vivienda o que tienen algún hijo chico, que buscan unidades de dos y tres ambientes”, señala Walger.

El interés por la microzona también se refleja en los valores. Walger explica que un lote en Palermo bien ubicado tiene una incidencia de entre US$700 y US$900 dólares/m², mientras que en Chacarita arrancan en US$500 y pueden alcanzar los US$700/m². “Esa variación de tierra es grande, porque después construir sale lo mismo en cualquier lado, la gran diferencia la hace el valor del lote”, finaliza

Chacarita, el único barrio argentino premiado por ser de los más cool