El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés) vigila y monitorea el avance de cinco ondas tropicales ubicadas en el océano Atlántico y el Golfo de México. Aunque de momento todas muestran bajas probabilidades de desarrollo ciclónico, una de ellas podría generar consecuencias climáticas como lluvias excesivas e inundaciones severas en el norte de Florida.
Se trata de la zona de baja presión que actualmente está localizada en el noroeste del Golfo de México, justo en las costas del sureste del estado de Texas y del sur de Louisiana, donde en estos momentos genera una gran cantidad de chubascos y tormentas eléctricas, según el NHC.
El ente pronosticó que a partir del viernes por la noche y el sábado al mediodía el sistema no encontrará condiciones propicias para su desarrollo y podría comenzar a debilitarse. Por lo tanto, la probabilidad de formación es del 10% tanto para las próximas 48 horas como para los próximos siete días. Sin embargo, aunque es poco probable que se desarrolle, el organismo sí anticipó lluvias intensas en algunas zonas del norte de la costa del Golfo durante el próximo día.
Por su parte, el experto en huracanes de AccuWeather, Alex DaSilva, consideró que “existe la preocupación de que este podría tener suficiente tiempo para evolucionar a una depresión tropical o una tormenta tropical con nombre antes de avanzar hacia la costa central del Golfo a finales de la semana”. Según el meteorólogo, la tormenta provocará lluvias torrenciales localmente y riesgo de problemas de inundaciones desde la costa de Texas hasta el norte de Florida y el sur de Georgia durante el resto de esta semana.
Las otras cuatro ondas tropicales del océano Atlántico que monitorea el NHC
Tal como anticiparon los especialistas días atrás, la actividad de la temporada de huracanes 2024 del océano Atlántico incrementa su ritmo exponencialmente a medida que se acerca la fecha del pico climatológico del 10 de septiembre. Además de la onda tropical ubicada en las costas de Texas, el NHC señaló otras cuatro más.
Una de ellas, denominada AL99, se encuentra en el noroeste del Atlántico, a varios kilómetros frente a las costas de Carolina del Norte. “Los datos recientes de los satélites indican que el sistema está produciendo vientos con fuerza cercana a la de los vientos huracanados”, alertó el NHC.
El ente además adelantó que podría adquirir algunas características tropicales o subtropicales durante los próximos uno o dos días mientras se desplaza en general hacia el norte-noreste, permaneciendo frente a estados de la costa del noreste de EE.UU., como Virginia, Nueva Jersey, Nueva York, Rhode Island, Massachusetts y Maine. Su probabilidad de formación –a 48 horas y a siete días– es del 30% y se debilitaría a partir del sábado.
Otra onda tropical se localiza en el centro del océano Atlántico, justo a mitad de camino entre el noreste de Sudamérica y las costas occidentales de África. La perturbación produce una actividad de chubascos limitados, pero no se espera que se mueva demasiado en los próximos días ni que experimente un desarrollo importante. “Algún desarrollo lento parece posible a principios de la próxima semana, cuando la perturbación comience a moverse lentamente hacia el noroeste”, anticipó, con una probabilidad del 20% de que esto ocurra.
La cuarta onda tropical que vigila el NHC se encuentra en el noroeste del mar Caribe y el suroeste del Golfo de México. “No se espera desarrollo antes de que el sistema alcance Belice y la Península de Yucatán a primeras horas del viernes. Algún desarrollo gradual es posible a finales del fin de semana y principios de la próxima semana después de que el sistema emerja sobre el suroeste del Golfo de México”, pronosticó el ente, que emitió una probabilidad del 20% para los próximos siete días.
La última también está ubicada en el Atlántico, pero mucho más cerca de las Islas de Sotavento y a varios kilómetros al este de las Antillas menores, y se mueve hacia el oeste-noroeste a una velocidad de entre 16 y 24 kilómetros por hora. De momento, el NHC advirtió que produce “actividad limitada de chubascos y tormentas”, pero aclaró: “Se espera que los fuertes vientos de nivel superior inhiban el desarrollo de este sistema durante los próximos días”.
Asimismo, señaló una probabilidad marginal del 10% de que, a principios de la próxima semana, las condiciones ambientales sean más propicias para un lento desarrollo mientras el sistema se desplaza sobre el suroeste del océano.