Cada noticia vinculada a James Cameron, inmediatamente llama la atención del público. Y es que el ambicioso director, responsables de enormes éxitos como Titanic, Terminator 2 o Avatar, se caracteriza por un despliegue imponente que logra muy buenos resultados en taquilla. Y durante la tarde del lunes, Cameron anunció un nuevo film que desea realizar en la medida que los tiempos de producción de Avatar se lo permitan.
Según reveló el portal Deadline, Cameron compró los derechos de la novela Ghosts of Hiroshima, cuya publicación está pautada para agosto del 2025. El autor de ese libro, Charles Pellegrino, tiene otra novela que también hace foco en el mismo período histórico, y se llama Last Train to Hiroshima. La intención de Cameron es combinar ambos libros y convertirlos en un único largometraje.
Cabe recordar que actualmente, Cameron está sumergido en la producción de la tercera parte de Avatar, una saga que está planteada para tener cinco películas en total. Si bien el realizador hace un tiempo aseguró que la cuarta y quinta entrega las iba a relegar, recientemente cambió de idea y aseguró que su intención es dirigirlas él mismo.
La película centrada en Hiroshima, se basa en la historia de un hombre que luego de escapar del bombardeo atómico en Hiroshima, logró subirse a un tren cuyo destino era Nagasaki. Allí, él pudo escapar del segundo bombardeo, y sobrevivir a los dos ataques.
En un diálogo con el portal Deadline, Cameron expresó: “Este es un tema sobre el que quiero hacer una película, y con el que vengo luchando desde hace varios años. Yo conocí a un sobreviviente de Hiroshima y Nagasaki, un hombre llamado Tsutomu Yamaguchi, justo antes de que muriera. Él me entregó el legado de su historia, por lo que tengo que hacer esto. No puedo darle la espalda”.
Una broma pesada
Si bien el paso del tiempo ayudó a morigerar los diferentes conflictos que surgieron al trabajar juntos, lo cierto es que Leonardo DiCaprio y James Cameron no lograron tener una buena conexión durante el rodaje de una de las películas más famosas de la historia del cine: la descomunal Titanic. Desde discusiones en el proceso de casting hasta varias bromas de mal gusto, el vínculo entre ambos no estuvo exento de chispazos.
Hace un tiempo resurgió una vieja anécdota sobre la filmación en la que un inexperimentado DiCaprio creyó que era buena idea “hacer bromas pesadas en el set”, según recordó el realizador canadiense. En una instancia de rodaje, el actor se acercó al director y le puso un cubo de hielo en su cabeza mientras él se encontraba muy concentrado en la orquestación de una secuencia clave. “Quería retorcerle el cuello”, admitó el director, quien se explayó sobre el trasfondo de un enojo que fue in crescendo, como la negativa de DiCaprio a mojarse constantemente -algo imposible teniendo en cuenta la película que protagonizaba- y su rechazo inicial al guion. “No quería hacer el personaje, le parecía que era aburrido”, reveló Cameron.
Por otro lado, Cameron también tuvo un cruce con el actor en la etapa de casting, cuando DiCaprio creyó que había obtenido el papel de Jack Dawson sin necesidad de audicionar. Tras una fructífera primera reunión en la que DiCaprio “conquistó a todo el mundo”, se produjo un choque cuando Cameron le pidió que volviera para leer una escena con Winslet, quien ya había sido contratada. “Volvió un par de días después y yo tenía la cámara preparada para grabar el video”, apuntó el director. “Él no sabía que iba a hacer una prueba, pensó que era otra reunión para conocer a Kate, así que le dije: ‘Ok, vamos a ir a la habitación de al lado, hacemos unas líneas y las voy a grabar’. Y él dijo: ‘¿Querés decir que voy a tener que leer?’. Le dije ‘sí’ y él dijo: ‘Oh, yo no leo.’ Le di la mano y le dije: ‘Gracias por venir’”, prosiguió Cameron con su relato de lo acontecido.
“Enseguida él me dijo: ‘Esperá, esperá, esperá. ¿Si no leo no consigo el papel? ¿Así de simple?’ Y yo le dije: ‘Sí ¡Vamos! Esta es una película gigantesca que a mí me va a llevar dos años de mi vida mientras que vos vas a estar afuera haciendo otros cinco proyectos durante el tiempo en el que yo trabaje en la postproducción. Esa es la razón por la que no voy a fastidiarme y tomar una decisión equivocada en el casting, por lo que vas a leer o no vas a conseguir el papel”, contó el realizador de Avatar.
Finalmente, Leo accedió a leer sus líneas de diálogo y su encanto reapareció. “Kate se iluminó y representaron la escena. Se habían abierto nubes oscuras, y un rayo de sol bajó e iluminó a Jack. Yo dije: ‘Muy bien. Es él el elegido”, rememoró Cameron.