El economista en jefe del Instituto Internacional de Finanzas (IIF) y exjefe de estrategia del banco Goldman Sachs, Robin Brooks, aseguró el lunes que el peso argentino sufrirá una nueva “devaluación inevitable e ineludible” como consecuencia del retorno de vinculación respecto al dólar.
La advertencia del académico, esbozada vía X (exTwitter), tomó como eje el diferencial que muestra hoy la moneda local en relación al valor del real brasileño.
“En términos reales, el peso argentino es la moneda más fuerte del mundo desde la pandemia, mientras que el real brasileño, que está justo al lado, es una de las más débiles. Esta divergencia es insostenible y, obviamente, tiene que terminar con otra gran devaluación del peso argentino…”, postuló Brooks.
Según el Índice de mayor ganancia valorativo de monedas elaborado por la agencia Bloomberg, en los primeros cuatro meses de 2024 el peso argentino se ubicó en primer lugar en el ranking comparativo global entre las 148 divisas, al registrar un alza de 25% respecto al dólar.
Le siguieron la lira turca (+7,75%) y el peso mexicano (+3,1%). En cambio, las más devaluadas fueron el yen japonés (-9,22%), el franco suizo (-7,57%) y el baht tailandés (-6,87%).
Lejos de mantener la tendencia, para el exGoldman Sachs el abandono de la máxima “Argentina está en un gran momento” que demarcó los primeros meses por “sobrevaluada una vez más”, forma parte de uno de los cinco cambios de rumbo que experimenta el mercado de cara al último tramo de 2024.
El escenario se condice con los resultados de la última encuesta elaborada también por Bloomberg News sobre perspectivas macro: los bancos internacionales esperan un salto de hasta 60% en el dólar oficial entre octubre y junio de 2025. En tanto, el promedio del tipo de cambio se ubicaría en $ 1.040 para fin de año (+ 7% desde los $ 972 actuales) y a $ 1.304,15 para el segundo trimestre de 2025 (+ 34,17 %).