La Navidad es una época mágica donde decorar el árbol es uno de los momentos más especiales. Sin embargo, en muchas oportunidades esta actividad puede volverse poco creativa dado que, si no se renuevan los accesorios, luce siempre igual.
A continuación, 10 formas de decorar el árbol de Navidad y sorprender con un diseño original para lograr que sea el centro de atención del hogar:
Temática personalizada
Elegir un tema que refleje las pasiones o intereses de la familia para que sea único y especial. Por ejemplo, si a los integrantes del hogar les gusta viajar, se puede adornar el árbol con miniaturas de aviones, mapas y recuerdos. O para los amantes de la música, utilizar partituras, discos pequeños y notas musicales.
Elegir colores no tradicionales
Si bien los colores más usados suelen ser el rojo o el dorado, puede ser un buen momento para incorporar una paleta diferente, como tonos pasteles, blanco y negro, o incluso un degradado. Un árbol monocromático o en colores inesperados como el turquesa o el cobre puede dar un toque moderno y sofisticado.
Adornos propios
Nada más original que decorar con adornos hechos por uno mismo. Es aconsejable utilizar materiales reciclados como cartón, tela o papel para crear figuras únicas. También se pueden incluir fotos familiares o dibujos de los niños. Esto no solo será más económico, sino que, además, añade un valor sentimental.
Incorporar luces novedosas
Las luces siempre son protagonistas, pero pueden ser utilizadas de forma creativa. Es recomendable elegir luces que cambien de color, parpadeen al ritmo de la música o tengan formas inusuales, como estrellas o copos de nieve. También se pueden crear patrones específicos, como espirales o zigzags, para un efecto único.
Elementos naturales
Incorporar detalles de la naturaleza para un árbol orgánico y cálido. Por ejemplo, piñas, ramas secas, rodajas de madera y frutas deshidratadas como naranjas o limones son opciones perfectas. Este estilo rústico crea un ambiente cálido y elegante.
Un árbol temático para niños
Otra buena alternativa es hacer que los pequeños de la casa se emocionen decorando un árbol pensado solo para ellos. Se aconseja incorporar adornos de sus personajes favoritos, colores brillantes y figuras de animales. Incluso se pueden incluir dulces en envoltorios decorativos que puedan tomar durante las fiestas.
Estilo minimalista
Si se prefiere un look más limpio y moderno, se puede apostar por un árbol minimalista y sumar adornos sencillos en tonos metálicos o neutros e intentar distribuirlos con simetría. Se puede complementar con luces blancas cálidas para un toque elegante.
Decoración inspirada en cuentos de hadas
Crear un árbol mágico con adornos que remitan a cuentos de hadas es una alternativa diferente, en la que se pueden incluir pequeñas casas de madera, figuras de duendes, hadas o unicornios, y muchas luces brillantes que simulen luciérnagas. Este diseño suele cautivar a niños y adultos por igual.
Estilo vintage
Recuperar el encanto de épocas pasadas con un árbol vintage es otra opción que se distingue de lo convencional. Para ello, es preciso buscar adornos antiguos, cintas de encaje y colores como el dorado y plateado envejecidos. También se pueden utilizar juguetes retro o postales navideñas antiguas para un toque nostálgico.
Un árbol comestible
¿Por qué no decorar con golosinas? Incorporar galletas con decoraciones, bastones de caramelo, mini cupcakes y chocolates envueltos. Además de ser una decoración deliciosa, será irresistible para los invitados.
Con estas ideas, se puede convertir al árbol de Navidad en una obra de arte que refleje la creatividad y personalidad de los anfitriones, dejando que la magia de esta fecha brille en cada rincón del hogar.