El Pleno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) estudiará mañana el informe emitido por su Gabinete Técnico a petición de la presidenta del CGPJ y del Tribunal Supremo (TS), Isabel Perelló, el cual impone como criterios prioritarios el mérito y la capacidad frente al género, para adjudicar las cuatro presidencias de sala que están en juego en el TS.
En el orden del día para el cónclave de este jueves consta la “toma de conocimiento” de dicho informe, encargado por Perelló para decidir cómo aplicar la regla de paridad, ya que la nueva ley establece que en los nombramientos discrecionales “se garantizará el principio de presencia equilibrada de mujeres y hombres, de tal manera que las personas de cada sexo no superen el 60% ni sean menos del 40%”.
El informe parte de la “premisa necesaria” de “la sujeción del procedimiento de nombramiento a los principios constitucionales de mérito y capacidad” y recuerda que “la jurisprudencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), del Tribunal Constitucional (TC) y del Tribunal Supremo (TS) excluyen claramente que en trance a proceder a un nombramiento se pueda atribuir al sexo de los candidatos, en términos imperativos, una relevancia mayor que al mérito y capacidad”.
Además, considera que la regla de paridad no debe aplicarse en cada nombramiento, sino tenerse en cuenta respecto al conjunto de las plazas ofertadas en la carrera judicial. Y sitúa el cumplimiento de la misma a lo largo del mandato del CGPJ (cinco años), aunque recalca que si no se logra el objetivo tampoco hay “consecuencias jurídicas”.
Según fuentes del órgano de gobierno de los jueces consultadas por Europa Press, el Pleno se limitará a debatir el informe sin llegar a votar, dada la pugna interna que hay para decidir cómo aplicar la regla de paridad a estos cuatro nombramientos, ya que marcarán la pauta a la hora de cubrir las más de cien vacantes que el anterior bloqueo en la renovación del CGPJ dejó en la cúpula judicial.
Y es que el CGPJ cuenta con otro informe, el firmado por los vocales progresistas Lucía Avilés y Carlos Hugo Preciado en la Comisión de Igualdad, que –por contra– establece que la regla de paridad debe interpretarse de modo que al menos dos de las cuatro presidencias de sala del Supremo sean ocupadas por mujeres.
POSICIONES OPUESTAS
Estos dos documentos reflejan las distintas visiones que defienden los bloques conservador y progresista del CGPJ, el primero de acuerdo con el informe técnico y el segundo con el de Avilés y Preciado. Así las cosas, ‘de facto’ hay un empate a diez que Perelló podría romper, si bien las citadas fuentes apuntan que aún estudia el asunto.
Entretanto, el proceso para adjudicar las presidencias de las salas de lo Civil, Penal, Contencioso-Administrativo y Social del TS sigue su curso. Este martes, los siete aspirantes comparecieron ante la Comisión de Calificación para defender sus candidaturas, siendo las más relevantes las de Ana Ferrer y Andrés Martínez Arrieta en la Sala Segunda y las de Pilar Teso y Pablo Lucas en la Sala Tercera, por la trascendencia política de los asuntos que tratan.
Las fuentes consultadas indican que ese mismo empate se da, por ahora, en el apoyo a dichas candidaturas. Así, el bloque progresista ha cerrado filas en torno a Ferrer y Teso mientras que los conservadores abogan por Martínez Arrieta y Lucas. En este contexto, las otras ternas –Ignacio Sancho para la Sala Primera y Juan Molins y Concepción Ureste, en la Sala Cuarta– podrían cobrar importancia a medida que avancen las negociaciones en el seno del CGPJ.