El Fondo Monetario Internacional (FMI) aprobó un nuevo programa con financiamiento por u$s 20.000 millones para la Argentina, que se convierte así en el país al que tiene mayor exposición. Y reconoció que se trata de un plan de riesgo excepcional.
“El personal técnico considera que la capacidad de Argentina para reembolsar al Fondo sigue sujeta a riesgos excepcionales”, sostiene el informe que el staff elevó al directorio para la aprobación del programa, el Staff Report.
Esos riesgos dependen “de las medidas políticas tempranas y de la implementación sostenida del plan de estabilización para alcanzar los objetivos de acumulación de reservas y asegurar la reanudación del acceso al mercado antes del vencimiento de las recompras al Fondo”.

En ese marco, el organismo admite que “el margen de maniobra sigue siendo limitado, especialmente en el contexto de bajos niveles de reservas, elevadas obligaciones de servicio de la deuda cambiaria, un historial de volatilidad de los flujos de capital y un entorno externo más propenso a shocks”.
Cuánto hay que pagarle al FMI
Según los cálculos del organismo, la exposición del Fondo alcanzaría un máximo de DEG 43.100 millones en 2026. Esto marca la mayor exposición en la historia del Fondo.
La cifra superaría el 100% de las reservas internacionales brutas hasta finales de 2027 y se mantendría por encima del 1000% de la cuota hasta finales de 2029.
Las obligaciones totales del Fondo alcanzarían un máximo de más de DEG 8.900 millones en 2030, lo que generaría necesidades generales de financiamiento externo bruto ligeramente superiores, que promediarían alrededor del 9% del PBI (excluyendo el servicio de la deuda interna del sector público) en el período estimado.
Las obligaciones máximas con el Fondo constituirían alrededor del 9% de las exportaciones proyectadas y el 15% de las reservas proyectadas del Banco Central y persistirían en niveles elevados durante varios años después del final del período del programa.
Volver al mercado de deuda para pagarle al FMI
Pese a esto, el staff consideró que “se cumple el criterio que marca que el país tiene perspectivas de obtener o recuperar acceso a los mercados de capital privado dentro de un plazo y en una escala que le permitan cumplir con sus obligaciones vencidas con el Fondo”.

Para el organismo, la mayor credibilidad del ancla fiscal generó mejoras crediticias y de la cotización de los bonos, aunque sufrieron en los últimos días por el contexto de “creciente incertidumbre global”.
En ese marco, destaca que “se finalizó un acuerdo de REPO para impulsar la liquidez a corto plazo (con diferenciales en torno a los 475 puntos básicos) y importantes empresas argentinas han emitido bonos denominados en divisas con diferenciales muy favorables (de alrededor de 300-500 puntos básicos) en los últimos meses”.
Por otra parte, enfatizó que el Gobierno reservó una serie de divisas para asegurar el pago a bonistas en julio de este año “lo que refuerza aún más la confianza y la disposición a mantenerse al día”.
El plan para volver a tomar deuda en el mercado
Sobre la vuelta a los mercados voluntarios de deuda, anticipan que en el Gobierno “están considerando y planificando activamente cómo volver a acceder a los mercados a medida que las condiciones lo permitan, y las perspectivas de hacerlo a tasas más favorables durante el resto de 2025 y posteriormente son sólidas”.
Para justificar esa afirmación, el staff del FMI cita las “medidas para respaldar el ancla del balance fiscal general; las mejoras previstas inicialmente en el régimen monetario y cambiario para mantener los superávits externos, reconstruir las reservas y fortalecer la resiliencia; y las reformas promercado en curso para impulsar la productividad, la competitividad y la gobernanza”.
Con el desarme de las restricciones cambiarias esperan que se impulse la inversión extranjera directa -el ministro Luis Caputo dijo que había empresas esperando esa medida para invertir-. Y suman que las “mejoras estructurales proyectadas en la balanza de pagos externa energética y minera aumentarán la confianza en la capacidad de pago” de divisas del país.
“Se espera que un nuevo programa del Fondo con un importante apoyo inicial, junto con estas medidas de política y las salvaguardias para garantizar su uso adecuado, catalice el apoyo oficial y el acceso oportuno al mercado”, resumieron los técnicos sobre las condiciones para poder cobrar.