Los pasillos de la Clínica Estética Cabani, han visto desfilar en más de una oportunidad a la presidenta Dina Boluarte, quien se ausentó del cargo para someterse a cirugías estéticas. Si bien desde Palacio de Gobierno negaron esta información, el cambio que se ve en las fotos oficiales, le han valido el rechazo del más de 93 % de los peruanos por la frivolidad y desconexión con la gobierna.
Pero, en esta oportunidad, el centro de la indignación no es para Dina Boluarte, sino para presidenta ejecutiva de EsSalud, María Elena Aguilar, quien asumió el cargo en octubre de 2023.
Una designación que aparentemente se hizo siguiendo todos los lineamientos establecidos por ley; sin embargo, existe un detalle, la doctora Aguilar no consignó en su declaración jurada que trabajó con el doctor Mario Cabani, cirujano plástico y médico personal de la presidenta Dina Boluarte.
Esta relación, documentada, pero omitida en su Declaración Jurada de Intereses, ha levantado serios cuestionamientos sobre las bases éticas y legales de su designación.
Un pasado no declarado
María Elena Aguilar trabajó en la Clínica Estética Cabani, propiedad del cirujano Mario Cabani, desde donde construyó una estrecha relación profesional y personal con este último. A pesar de ello, Aguilar no incluyó esta experiencia en su declaración jurada. La omisión de esta información adquiere mayor relevancia al considerar que Cabani no solo es el médico de confianza de Boluarte, sino también una figura influyente en círculos cercanos al poder político, según informó el reportaje de Panorama.
La conexión entre Aguilar y Cabani no se limita a lo laboral. Según información revelada, Aguilar consiguió que su hija, María Alejandra García, trabajara en la clínica del cirujano, reforzando los lazos entre ambas partes. Además, la relación con la familia Cabani se extiende más allá del ámbito profesional, pues la doctora Aguilar es amiga de promoción de Liliana Cabani, hermana del médico.
Las conexiones entre la presidenta de EsSalud y el cirujano personal de Dina Boluarte no son una simple coincidencia. Según diversas fuentes consultadas por el citado medio, Cabani habría recomendado a Aguilar para los altos cargos que esta ocupa actualmente.
Más Conexiones
Por otro lado, el historial profesional de Aguilar incluye un hecho adicional que genera controversia: se afirma que Cabani le solicitó encargarse de uno de los cuidados postoperatorios de Boluarte. Aunque esto no constituye en sí una irregularidad, subraya la confianza que existe entre las partes, misma que ha servido como puente para fortalecer la red de influencias alrededor del gobierno.
Otro hecho que llama la atención es el nombramiento del hijo de María Elena Aguilar, Dante García Aguilar quien contrató con el Estado, recientemente, se descubrió que recibió órdenes de servicio por un monto total de S/6,000 del Proyecto Especial Legado de la Presidencia del Consejo de Ministros
Lo curioso es que Dante García Aguilar se tituló como administrador el 2024, el mismo año que contrató con Legado.
Respuesta
Tras la emisión del reportaje, María Elena Aguilar se comunicó con el dominical y admitió haber trabajado con Mario Cabani, pero en su descargo se refiere a esto como ‘práctica médica’ y no aclara porque no consignó esos datos en su declaración jurada.
También aclaró que su nombramiento se hizo respetando todos los procesos establecidos de acuerdo a ley, con lo que negó que el cirujano de la mandataria haya tenido algún tipo de injerencia en su designación.
Por su parte, Palacio de Gobierno también respondió de una forma similar a la doctora Aguilar y explicó que fue el Ministerio de Trabajo el ente encargado de nombrar a la presidenta de EsSalud.
El futuro de EsSalud y la nula legitimidad del gobierno de Boluarte dependerán, en gran medida, de cómo respondan a estas acusaciones.
