En contadas ocasiones las redes sociales están en calma. Uno de los principales canales comunicativos del mundo, X (antiguo Twitter), está estrechamente ligado a la polémica, de la que no se libra casi nadie. En esta ocasión, el youtuber e influencer Wall Street Wolverine, cuyo nombre real es Víctor Domínguez, ha desatado un intenso debate tras sus declaraciones en redes sociales, donde tildó a los pensionistas de ser el “colectivo más egoísta de España” y un “lastre” para el progreso del país. Estas palabras, pronunciadas en un vídeo titulado “El melón de los pensionistas que nadie quiere abrir”, generaron rápidamente indignación.
Concretamente, el colectivo de jubilados le reprochaba su “hipocresía” dada su residencia en Andorra, país al que el youtuber se mudó en 2020 para pagar menos impuestos. En su vídeo, Domínguez argumenta que muchos pensionistas actúan con indiferencia hacia el futuro del país y las nuevas generaciones. Según él, este colectivo solo se preocupa por incrementar ligeramente su pensión, sin considerar el impacto económico a largo plazo que esto podría tener para las finanzas públicas y los jóvenes. “Muchos pensionistas piensan que, si se tiene que hundir el país para que les den 20 euros más de pensión, se hunde el país y se la pela”, aseveraba el influencer.
El influencer Víctor Domínguez (Wall Street Wolverine), vinculado a la ultraderecha de VOX, llama egoístas a los pensionistas. Este tipo factura en Andorra para no pagar impuestos. Muy poca vergüenza. pic.twitter.com/3t5NUMNuCx
— Fonsi Loaiza (@FonsiLoaiza) September 16, 2024
Reacciones en X (antiguo Twitter)
Las reacciones a estas duras declaraciones no tardaron en aparecer. Usuarios en aplicaciones como Twitter o Instagram criticaron con fiereza la postura del influencer, señalando que la mayoría de jubilados en España han trabajado y cotizado durante décadas, contribuyendo al desarrollo del país, cosa que Domínguez no hace desde 2020. De hecho, recordaron que gran parte de este colectivo sobrevive con pensiones mínimas que apenas cubren sus necesidades básicas.
Un comentario destacado en redes señaló: “Ataca a los pensionistas, muchos de los cuales se han roto la espalda más de 35 años trabajando y cotizando. Y lo dice desde Andorra, tan tranquilo, para no pagar impuestos”. Esta observación refleja una crítica frecuente hacia Domínguez, quien se mudó al país vecino para reducir su carga impositiva, un hecho que muchos consideran incompatible con sus críticas a la gestión pública y al sistema de pensiones en España. El debate sobre la sostenibilidad del modelo laboral de la Seguridad Social es un tema recurrente en el sector económico. España, como muchos otros países europeos, enfrenta un desafío demográfico: el envejecimiento de la población y una baja tasa de natalidad dificultan la financiación de las pensiones a largo plazo.
Pensionistas en defensa de sus derechos
En su intervención, el creador de contenido digital argumentaba que el sistema actual de pensiones no es sostenible a largo plazo, abogando por un cambio estructural que impida seguir lo que él describe como una “estafa intergeneracional”. Según Domínguez, los jubilados son víctimas del sistema, pero, en lugar de pedir un cambio para evitar que las futuras generaciones sufran lo mismo, optan por defender un modelo que él considera inviable.
No obstante, las críticas más severas hacia el youtuber no solo vinieron de los jubilados, sino también de otros sectores que le señalaron como hipócrita. Fonsi Loaiza, periodista y activista, fue uno de los que atacó directamente a Domínguez en redes, acusándolo de carecer de legitimidad para hablar de solidaridad cuando él mismo decidió mudarse a Andorra para no pagar impuestos en España. Loaiza afirmó: “Muy poca vergüenza hablar de egoísmo cuando te mudas para no contribuir al país del que vienes”.
La respuesta de los pensionistas también se hizo notar a través de manifestaciones y en redes sociales, donde muchos recalcaron que, lejos de ser egoístas, este colectivo se ha mostrado solidario en múltiples ocasiones, no solo defendiendo sus propios derechos, sino también apoyando causas sociales como la educación pública, la sanidad o los derechos humanos. “Pero si los pensionistas hasta se manifiestan en la calle por derechos ajenos a los suyos como la educación y la sanidad”, escribió un usuario, recordando que las luchas sociales no son exclusivas de los jóvenes.