En octubre, la canasta necesaria para no ser pobre subió 2,3%, menos que la inflación

Un hogar de 4 miembros, compuesto por un varón de 35 años, una mujer de 31 años, un hijo de 6 años y una hija de 8 años, necesitó en octubre 986.586 pesos para reunir los bienes que componen la canasta básica total,  según la calcula el INDEC. Esta cifra supone un aumento de 2,3%  en relación a la misma canasta del mes de septiembre, una suba que supone un aumento menor al que hoy se anunció para el IPC de octubre,  que fue de 2,7%.

En tanto,  la canasta alimentaria que debió reunir ese mismo tipo de familia para no caer en la indigencia,  se elevó a 434.620 pesos,  lo que supone una suba de 1,4% respecto de septiembre, también menor a la suba inflacionaria de octubre y a la suba de la canasta necesaria para no ser pobre, un triple motivo de festejo para el Gobierno, que hoy además celebró a nivel político, ya que se cayó la sesión en Diputados para tratar la ley de DNU y el canje de deuda, habiéndose  postergado hasta el 21 de noviembre.

Qué son y cómo se calculan las canastas básica total y alimentaria

El Indec establece la Canasta Básica alimentaria (CBA) considerando los requerimientos mínimos de energía y proteínas necesarios para cubrir las necesidades de un hombre adulto de entre 30 y 60 años con actividad física moderada. Esta referencia, denominada “adulto equivalente”, se calcula en base a datos de la Encuesta Nacional de Gastos de los Hogares (ENGHo), que proporciona información sobre los hábitos de consumo alimentario de la población.

Para calcular la Canasta Básica Total (CBT), el INDEC expande la CBA para incluir también los bienes y servicios no alimentarios. Esta ampliación se realiza mediante el coeficiente de Engel, una medida que refleja la proporción de gasto en alimentos en relación con el gasto total observado en el grupo de referencia.

La composición de cada hogar, medida en términos de adultos equivalentes, permite determinar el costo específico de la CBA para cada hogar. Este valor se obtiene multiplicando el costo de la CBA del adulto equivalente por la cantidad de adultos equivalentes en el hogar, de acuerdo con las tablas de equivalencias incluidas en la nota metodológica.