
El exjefe de Gabinete, Guillermo Francos, y el exministro del Interior, Lisandro Catalán, visitarán la Casa Rosada este martes para despedirse y se reunirán con sus sucesores, Manuel Adorni y Diego Santilli, según pudo confirmar El Cronista. De esta manera, darán por finalizada la primera etapa del Gobierno libertario, en una suerte de “traspaso” al segundo tramo de gestión.
El encuentro se dará el día previo a la jura de los flamantes ministros, quienes de todos modos ya debutaron como tal con la primera reunión de Gabinete que encabezó el presidente Javier Milei el lunes, en la que comenzaron a delinear la hoja de ruta a seguir durante el verano, cuando planean tratar las reformas estructurales pendientes.
Según las fuentes consultadas, no se prevé que el jefe de Estado participe de la reunión de despedida. Milei tampoco se pronunció, hasta ahora, sobre la salida de los funcionarios, aunque sí festejó la llegada de los ministros entrantes, a quienes eligió por propuesta de su hermana, Karina Milei.
Con la cumbre de traspaso se buscará resignificar la renuncia de Francos, a quien apreciaban en el Gabinete y, según deslizaron varias fuentes del Gobierno por lo bajo, no tuvo una salida acorde. “Se fue mal, sufrió un destrato”, sostuvieron en la Casa Rosada ante El Cronista.
El comunicado trasnochado del saliente jefe de Gabinete, quien había asumido en reemplazo de Nicolás Posse tras lucirse con el tratamiento de la Ley Bases durante el 2024, se remontó a explicar que se dio por “los persistentes trascendidos sobre modificaciones en el Gabinete Nacional”.
El jueves previo, por la noche, el exministro coordinador le había pedido una reunión al Presidente para clarificar su futuro, ya que la presión mediática por su salida era insostenible. Se trata del mismo día en que brindó su última entrevista como ministro: en ella se mostró firme en su puesto y menos de 24 horas después anunció su renuncia.
Señor Presidente de la Nación Ante los persistentes trascendidos sobre modificaciones en el Gabinete Nacional, me dirijo a Usted con el objeto de presentarle mi renuncia al cargo de Jefe de Gabinete de Ministros, para que pueda afrontar sin condicionamientos la etapa de gobierno…
— Guillermo Francos (@GAFrancosOk) November 1, 2025
Milei tuvo que interrumpir su cena con el expresidente Mauricio Macri para anunciar que el portavoz presidencial iba a asumir en su lugar. El líder del PRO, de hecho, se mostró crítico de esa designación. Su re-acercamiento con Milei, por caso, había sido planeado por Francos.
Lo cierto es que el Presidente no tenía en sus planes un cambiazo tan veloz y, de hecho, en la Casa Rosada retumbó el malestar con el excanciller Gerardo Werthein y con el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, por precipitarse con sus renuncias en la semana preelectoral. El último finalmente se quedó, a pedido de Milei, hasta nuevo aviso, luego de haberle dicho a Infobae que se iba el día después de los comicios.
Todos los anuncios se esperaban para el lunes 27 de octubre. Por caso, Francos y Catalán se daban por eyectados el mismo domingo electoral y el exjefe de Gabinete se sorprendió cuando Milei les pidió que comuniquen los resultados. Su permanencia parecía ratificada, al menos temporalmente, por el novedoso triunfo en las urnas y, empoderado, Francos convocó a la reunión masiva con gobernadores la semana pasada.
Sin embargo, las presiones internas, más allá de los medios, pedían por que los cambios anticipados no esperen hasta el 10 de diciembre. “Hacer el cambios el domingo no tenía ningún sentido pero tiene que ordenar la negociación política, que la gestión esté coordinada”, insistió una funcionaria de alto rango la semana pasada.
La falta de comunicación con los eventuales salientes tampoco ayudó a que la inquietud dentro del Gabinete se apaciguara. A ello se suma que la interna entre la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y el asesor presidencial, Santiago Caputo, a quien apuntaban como posible superministro del Interior con facultades ampliadas hasta el domingo pasado, cuando finalmente Milei el domingo, tras una reunión con su asesor en la Quinta de Olivos, llamó a Diego Santilli para proponerle la silla a cargo de coordinar con los gobernadores.
Caputo ya estaba abiertamente enemistado con Francos, quien dio la primera señal de quiebre cuando criticó en Infobae En Vivo que el asesor no tenía responsabilidad en la toma de decisiones y debía tener una firma oficial. No se saludaron en la jura de Pablo Quirno como ministro de Relaciones Exteriores, el reemplazo de Werthein, ni lo tomó en cuenta para la convocatoria a los gobernadores la semana pasada, mientras que sí participó de las conversaciones Martín Menem, la espada de Karina Milei en Diputados.
La “Mesa Federal” que creó Milei tras la derrota electoral estaba compuesta por Francos, Catalán y Luis Caputo, ministro de Economía
El desgaste por las balas cruzadas entre el “triángulo de hierro” y la postergación de lo anunciado culminó en lo que cerca de Francos consideraron un desplante de Milei. “Nunca estuvo aferrado al cargo, si tenía que irse lo iba a hacer”, siempre dijeron sus allegados.
La salida de Catalán se dio naturalmente, puesto que su nombramiento de secretario del Interior a Ministro se dio producto de una decisión entre Francos y Milei. Él era la mano derecha del jefe de Gabinete y su permanencia dependía de él, como también sucede con otras áreas: José Luis Vila, secretario de Asuntos Estratégicos y operador de Inteligencia ya presentó también su renuncia el fin de semana. Todavía está pendiente de definir qué sucederá con Daniel Scioli en la secretaría de Turismo.
Que Karina Milei quería que Adorni sea su reemplazo fue anticipado por El Cronista ya en junio. La decisión iba a depender de que Milei tome partido en la interna: la victoria electoral que ratificó la estrategia político-partidaria de Karina Milei y los Menem para algunos fue solo una excusa, puesto que por lo bajo deslizan que siempre la ganadora iba a ser la hermana.
