Johnny Depp es uno de esos actores que no pasan desapercibido. No lo hizo cuando comenzó, no lo hizo cuando se convirtió en una estrella y no ha dejado de hacerlo incluso cuando Hollywood se ha negado a que estuviera en la conversación, tras su polémico caso con su exmujer Amber Heard. Si bien es cierto que hace tiempo que el intérprete de Eduardo Manostijeras pasó a un segundo plano en cuanto a actuación se refiere, lo cierto es que sigue siendo una persona con gran peso en el mundo del cine, ya sea en Hollywood o fuera de él.
Es por ello que su opinión sigue contando mucho, porque al fin y al cabo pocos actores han salido en las últimas décadas tan icónicos y con tanto rango para dar vida a personasjes tan distintos como el Capitán Jack Sparrow de Piratas del Caribe, Willy Wonka en Charlie y la fábrica de chocolate o El Sombrerero Loco en Alicia en el país de las maravillas. Solo un actor así podría ser voz autorizada a la hora de determinar quién es el mejor en el campo de la interpretación, y eso es precisamente lo que ha hecho Depp, designar su apuesta como mejor actor en los últimos dos siglos. O lo que es lo mismo, en toda la historia del cine.
“Marlon Brando es quizá el mejor actor de los dos últimos siglos. Pero su mente es mucho más importante que la actuación. La forma en que mira las cosas, no juzga las cosas, la forma en que evalúa las cosas. Es tan importante como… ¿Quién es importante hoy? Jesús, no mucha gente… ¡Stephen Hawking!”, comentaba en una entrevista para IMDB. Aunque hay otros intérpretes como Meryl Streep que podrían no pensar igual y señalar a otro actor como el mejor, Depp aportaba sus propias razones para escoger al actor de El padrino como su favorito.
Jack Sparrow conoce a El Padrino
Marlon y yo nos conocimos por teléfono, porque quería hacer Don Juan DeMarco con él. Hablamos tres horas por teléfono, yo estaba en Nueva York y él en Los Ángeles. Volví a la semana siguiente, me invitó a cenar; nos sentamos y hablamos, y fue… conectamos en muchos niveles, sobre todo en el hecho de que nadie quiere ser la novedad”, relataba Depp, quien desvelaba además que el difunto actor le dio un gran consejo. Su buena relación se confirmó en 1997, cuando Brando aceptó trabajar junto a Depp pero también a sus órdenes, ya que debutaría como director con The Brave.
“Quería que escapara del cine por un tiempo: ‘Tómate un año sabático. Continúa. Estudia Shakespeare’. Me aseguró que cuando había llegado al punto en el que sentía que podía hacer Hamlet solo significaba que ya era demasiado tarde. Así que me dijo: ‘Hazlo ahora, hazlo mientras puedas’”, recuerda Depp. Lo cierto es que su momento sabático lo ha tenido de forma involuntaria a raíz del caso con Amber Heard, pero el actor ya ha regresado al cine aunque lo ha hecho también en nuevas facetas, como productor o directamente director. Su última película presentada hasta la fecha, Modi, cuenta precisamente con él como director pero sin actuar, en favor de un reparto en el que están Stephen Graham o el mismísimo Al Pacino, aunque seguro que a Depp lo que le hubiera encantado es haber dirigido una vez más a Brando.