La Armada de Ecuador confiscó dos toneladas de droga en las aguas de Galápagos

Miembros de la Armada ecuatoriana requisaron una embarcación que transportaba 57 bultos con droga. (Ministerio de Defensa)
Miembros de la Armada ecuatoriana requisaron una embarcación que transportaba 57 bultos con droga. (Ministerio de Defensa)

Las unidades navales y aeronavales de la Armada de Ecuador lograron interceptar una embarcación que se movilizaba cerca de una de las islas del archipiélago de Galápagos. La nave transportaba más de medio centenar de bultos con droga, así lo informó el Ministerio de Defensa. La operación militar sucedió el último sábado, 3 de agosto.

Según informó la cartera de Estado, los 57 bultos de droga pesaban alrededor de 2 toneladas. La embarcación era tripulada por dos ecuatorianos y un colombiano. De acuerdo con la información oficial se puede inferir que era una lancha de tipo artesanal pues contaba con “tres motores fuera de borda”. La droga incautada está valorada en USD 60 millones en el mercado norteamericano, indicó el ministerio en un comunicado.

La embarcación fue detenida por los uniformados a 250 millas náuticas de la isla San Cristobal y a una distancia de 350 millas del Ecuador continental.

Se estima que la droga está valorada en USD 60 millones (Ministerio de Defensa)
Se estima que la droga está valorada en USD 60 millones (Ministerio de Defensa)

Las islas Galápagos, ubicadas a unos 1.000 kilómetros frente a la costa de Ecuador, se han convertido en una zona de tránsito del tráfico de drogas que parte desde Manabí, principalmente, y se dirige hacia Norteamérica y otras partes del mundo. Además, la vasta extensión de la Zona Económica Exclusiva (ZEE) de Ecuador alrededor de las Galápagos se ha convertido en un amplio espacio marítimo donde las actividades ilícitas –como el tráfico de drogas o la pesca ilegal– pueden pasar desapercibidas.

En Ecuador, los narcotraficantes suelen cooptar a pescadores artesanales que adecúan sus lanchas para transportar la droga en un viaje riesgoso conocido como “la vuelta” y que promete miles de dólares de paga a trabajadores que laboran en condiciones sumamente precarias. A finales del 2022, Infobae recorrió un pueblo pesquero ecuatoriano y observó las duras condiciones en las que trabajan los pescadores ante el olvido de los gobiernos. Entonces se relató cómo, en medio de las aguas, los pescadores artesanales ecuatorianos son víctimas de piratas que los sobornan y roban. Este sector que pertenece a uno de los más importantes en materia económica en el país, se siente abandonado por las autoridades, que buscan a los pescadores cuando necesitan votos, pero los olvidan cuando deben gobernar.

En Ecuador, el sector pesquero artesanal está caracterizado por “una problemática compleja de marginalización y pobreza de las comunidades pesqueras artesanales”. La mayoría de los pescadores “derivan su sustento casi exclusivamente de esta actividad”, según la Conferencia Plurinacional e Intercultural de Soberanía Alimentaria ecuatoriana. Al mes, un pescador artesanal percibe entre USD 100 y USD 300 en promedio. Es esa situación la que expone a los pescadores artesanales a diversas vulnerabilidades.

Pescadores ecuatorianos sucumben al narco bajo amenazas - Salinas
Pescadores ecuatorianos sucumben al narco bajo amenazas- (Enrique ORTIZ / AFP) (ENRIQUE ORTIZ/)

Pero los piratas no solo les roban a los pescadores, también los extorsionan. Don Alberto (nombre protegido) un pescador artesanal manabita, que también conversó con Infobae aseguró que los piratas los sobornan para dejarlos trabajar. Como no ven que las autoridades actúen para detener estas amenazas, se sienten “abandonados por los poderes centrales”, relató el pescador. En ese escenario, donde son acechados por piratas que trabajan para el narcotráfico, algunos pescadores artesanales son cooptados para traficar droga. “Se van tres o cuatro días hasta llegar a Guatemala”, mencionó José. Los pescadores viajan en lanchas rápidas de fabricación artesanal que pueden tener entre tres y siete motores: “Les pagan USD 250.000″, aseguró José. Al preguntarle si los traficantes cumplen con el pago, José indicó que sí, pero advirtió que, por seguridad, “solo se puede hacer la vuelta una vez”.

“La vuelta” es el nombre popular con el que se conoce a “una de las maneras de transportar clorhidrato de cocaína desde Ecuador”, según explica la investigación de Carolina Loza, publicada en el medio GK. Según el reportaje de Loza, entre 2015 y 2020, 900 ecuatorianos están presos en cárceles estadounidenses. De estos, “al menos 500 son pescadores de las provincias de Manabí y Santa Elena detenidos en altamar cuando hacían La vuelta”, se lee en la investigación periodística.