Los profesionales que precisa la industria militar: tres carreras universitarias y dos FP con salida laboral

(Feindef)

En un mundo en constante transformación, la industria de defensa emerge como uno de los sectores con mayor capacidad de innovación, inversión y generación de empleo cualificado. Frente a la tradicional visión que la relaciona únicamente con perfiles militares o científicos, el sector ofrece salidas profesionales reales y con gran futuro para jóvenes que optan tanto por estudios universitarios como por la Formación Profesional (FP).

La industria de defensa, que celebrará la cuarta edición de la Ferie de Defensa y Seguridad de España (Feindef) los próximos 12, 13 y 14 mayo, en Madrid, no solo se limita al desarrollo de armamento o a la protección territorial, sino que se ha diversificado, abriendo un abanico de oportunidades en áreas como la tecnología, la ingeniería, la ciberseguridad y la automatización. De esta manera, la formación técnica es clave para acceder a los puestos más demandados, permitiendo a los profesionales contribuir al avance de un sector esencial para la seguridad y soberanía de los países.

Detrás de cada blindado, submarino o sistema de radar, hay un equipo de ingenieros industriales encargados de diseñar, fabricar y mantener estos sistemas. La Ingeniería Industrial se caracteriza por su versatilidad y su capacidad para integrarse en diversas ramas de la industria, incluidas las relacionadas con la defensa. Esta titulación permite a los profesionales gestionar procesos productivos, mejorar la eficiencia en la fabricación y participar en la integración de sistemas complejos. Quienes elijan este camino estarán trabajando en la creación de tecnologías que tienen un impacto real en la seguridad nacional y global.

La defensa del espacio aéreo y el desarrollo de plataformas no tripuladas están marcando el futuro de la industria de defensa. En este contexto, la Ingeniería Aeroespacial se encuentra en el epicentro de los avances más innovadores. Desde el diseño de drones de última generación hasta el desarrollo de sistemas de guiado inteligente y plataformas como el futuro avión de combate europeo (FCAS), esta carrera permite a los estudiantes formar parte de proyectos punteros. La ingeniería aeroespacial es esencial para quienes sueñan con diseñar y probar tecnologías avanzadas que aún no han despegado.

La defensa moderna ya no solo se libra en tierra, mar o aire: también se combate en el ciberespacio. La digitalización y la ciberseguridad se han convertido en aspectos fundamentales de la defensa. Aquellos que se gradúan en Ingeniería Informática y de Telecomunicaciones se preparan para ser parte de equipos encargados de desarrollar inteligencia artificial, software de mando y control, criptografía o ciberseguridad táctica. Con la creciente dependencia de la tecnología en todos los ámbitos de la defensa, esta titulación ofrece una excelente oportunidad para contribuir a la protección de infraestructuras críticas y a la defensa contra amenazas digitales.

Formación Profesional

En cuanto a la Formación Profesional, varios grados superiores destacan como las mejores puertas de entrada al sector. Entre ellos, dos titulaciones son altamente demandadas por las empresas del ámbito de la defensa. La fabricación de piezas de precisión es una parte esencial de la industria de defensa. Los técnicos en mecanizado son responsables de crear las piezas que componen vehículos blindados, drones y sistemas balísticos.

Esta profesión exige una alta especialización, ya que la precisión en el mecanizado es crucial para garantizar el buen funcionamiento de los sistemas de defensa. Además, el sector cada vez valora más a estos profesionales por su capacidad para trabajar con máquinas de última tecnología y asegurar que cada componente cumpla con los estrictos estándares de calidad exigidos.

La automatización y el control de sistemas eléctricos son fundamentales en muchas plataformas de defensa, desde fragatas hasta fábricas de armamento. Los técnicos superiores en sistemas electrotécnicos y automatizados juegan un papel esencial en la instalación, programación y mantenimiento de estos sistemas. Este ciclo superior ofrece una rápida incorporación al mercado laboral, ya que la demanda de profesionales en automatización está en constante crecimiento. Además, las empresas de defensa buscan cada vez más perfiles con capacidad para innovar en el control de sistemas en entornos complejos y de alta exigencia tecnológica.

La industria de defensa española emplea a más de 100.000 personas y continúa invirtiendo de forma creciente en investigación, desarrollo e innovación (I+D+i). El sector se ha consolidado como un motor de empleo cualificado y una de las áreas con mayores perspectivas de futuro. Elegir una carrera universitaria o un ciclo formativo relacionado con la industria de defensa no solo es una decisión profesional inteligente, sino también una forma de contribuir al desarrollo de tecnologías avanzadas que refuercen la soberanía y la seguridad de un país.