Marley apareció en Telefe y dio un desesperado descargo tras la denuncia por abuso: “Fuimos novios, éramos adultos”

Quizás no sean los más apropiados para la situación, pero los términos futboleros pueden ayudar a entender mejor y más rápido lo que está sucediendo alrededor de Marley: golpeado por la grave acusación que se dio a conocer ayer por la noche -el abuso sexual de un menor de edad- el conductor decidió “jugar de local” para defenderse y, de alguna manera, también pasar al ataque. En Telefe, el canal de toda su vida, el líder de Survivor dejó ver “su primera jugada” para capear el temporal. ¿Le dio resultado? Quién sabe…

“En minutos habla Marley”. Así presentó el “Noticiero de la gente” del canal de las pelotas la presencia del hombre más cuestionado y buscado del momento. No era cosa de perderse el rating del morbo, por supuesto. Había que generar misterio y crear tensión para ponerlo en el banquillo de los acusados en el momento justo, en el instante preciso. Había que dejar, claro, que las mediciones fueran creciendo a medida que pasaba lo mismo con la expectativa de escucharlo.

Finalmente, Marley arrancó a hablar a las 13:32. Y esto dijo: “Estoy muy mal. Dormí pésimo. Me tomó muy por sorpresa. Estoy hablando por mis hijos, por Mirko y por Milenka, que es una bebé muy esperada y me llevó mucho tiempo lograr ese embarazo. En este segundo momento más esperado de mi vida aparee esto que son todas falsedades que vino con pedidos de dinero, amenazas que vengo viviendo desde antes. Tengo un montón de pruebas para demostrar que todo esto es falso”.

“Si, lo conozco, en realidad fue hace 25 años. Los dos eramos mayores. Eramos grandes. El estaba estudiando en a facultad. Fue un vínculo muy sano y muy lindo durante dos o tres años. No estoy acostumbrado a hablar de mi vida ni de mi sexualidad, y ahora me veo forzado a hacerlo. El se mudó a Estados Unidos, se casó, conocí al marido, íbamos a cenar. Yo le ponía likes a todo lo que hacía”.

EL DESESPERADO DESCARGO DE MARLEY TRAS LA DENUNCIA EN SU CONTRA

“En 2022 se comunica y me dice que estaba lleno de deudas y me pide que lo ayudara. Me pide una cifra gigante en dólares. No estaba en un gran momento yo, muy suelto, le dije que no podía, y no me dijo más nada. El año pasado apareció y me dijo que me tenía que comunicar con mi abogado, ese doctor Apolo, y me dijo que si no lo hacía iba a ir a la prensa a contar. Pensé que quería hablar de mi sexualidad. Me pareció una tontera en esta época, nunca imaginé en mi vida que su desesperación economica podía ser tanto como para hacer una denuncia como la que hizo”.

“Un ejemplo que tira abajo todo lo que dice: el dice que e 1996 me conoce y que va a mi casa en un barrio cerrado en Don Torcuato. Yo el terreno lo compré en el 98 y la casa se construyó en ese momento y recién me mudé en 1999, cuando él ya tenía 20 años. No lo puedo creer porque siempre me llevé bien, ayudé a su familia, a su mamá, a él, y esto me sorprende”.

“Nos presentamos espontáneamente. Buscaban hacer daño a través de extorsión. Cuando vieron que el dinero no se los daba aparecieron con esta mentira. Por suerte soy acumulador y tengo todas las pruebas que las voy a presentar donde se debe que es en la justicia”.

“Quiero el juicio de la verdad y quiero que se sepa todo. Como todo es mentira y tengo todas las pruebas para refutarlas quiero la verdad. Me están forzando a hablar y tengo que contar algo para ver si logran dinero. Me tiene muy preocupado porque no puedo creer lo que hacen. Durante 23 de los 25 años comimos juntos, me presentó al marido, a sus amigos, y ahora esto. Mi vida es super sana. Llevo a Mirko al colegio, lo llevo a actividades, vienen sus amiguitos, los traen, o los llevo yo. Prácticamente soy el Uber de mi hijo“.

“Tengo el momento en el que me pide la cantidad de dinero y el momento en el que me dice “si no me das la plata voy a hablar con tal periodista, con tal periodista, con tal periodista”. Para mi es una sorpresa total. Nos seguíamos en las redes con likes y con todo. Yo tengo buena relación con todo el mundo. Nunca hablé de mi sexualidad y en cierto modo me forzaron a hacerlo. Yo no tengo ganas de hacerlo. En un crucero que hice me crucé con un periodista de noticias que me preguntó si me podía hacer una nota. Le dije que sí. En el medio del reportaje, de la nada, me pregunta “vos soy gay”, entonces le pedí que apagara el grabador y le dije “sí, pero no me interesa hablar de esto públicamente, porque ni mi mamá lo sabe. Si se puede dejar afuera de la nota sería mejor, y me dijo que me quedara tranquilo. Fue la única vez que me preguntaron por mi sexualidad. Aquella vez y esta, donde me veo forzado a hablar”.