La mayoría de las encuestas le siguen dando bien al Gobierno. La imagen positiva del presidente, Javier Milei, supera a la mayoría de los políticos. Y bastante lejos en ese ránking se encuentran dos de los últimos mandatarios del país: Cristina Fernández de Kirchner y Mauricio Macri. Si se quiere ir más abajo en las mediciones hay que buscar al ex presidente, Alberto Fernández. Castigado por su gestión y por las denuncias de la ex Primera Dama, Fabiola Yañez, Alberto figura en los últimos lugares de esa tabla.
Tal vez el mensaje con el que supo llegar Milei a la gente tiene que ver con mostrarse auténtico. Con decir sin ocultar nada lo que piensa y sin ser políticamente correcto. Milei da la sensación de que no tiene nada que perder y de que llegó al sillón de Rivadavia porque los acontecimientos lo fueron llevando. En otras palabras, Milei se dio cuenta de que podía ser Presidente no hace más de cinco años, cuando los asesores ‘la vieron’.
El aguante a Milei es los sectores más vulnerables de la sociedad es digno de estudio. El ajuste que puso en marcha este Gobierno es de una magnitud que sorprendió a todo el arco político. La motosierra pasó por el Estado. También se eliminaron subsidios a las tarifas, situación que impacta de forma directa en los bolsillos. ¿La inflación bajó, alcanza con eso?
Ayer se conocieron los índices de pobreza e indigencia que elabora la Universidad Católica Argentina (UCA). En el primer semestre del año la Argentina pasó a tener el 52% de pobres. Los pobres son mayoría en el país. Está claro que Milei recibió una Argentina con miles de problemas económicos y dónde la cantidad de pobres no distaba tanto del número que dio a conocer la UCA, pero también está claro que las políticas de ajuste generaron, al menos en los primeros meses de Gobierno, más desempleo y más pobreza.
¿Qué fue lo que le pasó a la sociedad? ¿El ajuste pasó a ser popular? La pobreza alcanzó al 52% de la población y la indigencia al 17,9% en el primer semestre, según estimaciones de la UCA. Estas cifras representan un aumento significativo frente al 41,7% y 11,9% registrados por el Indec en 2023, y son los valores más altos desde 2004.
Según el sondeo de la UCA, 24,9 millones, residentes en áreas urbanas del país son pobres por debajo de la Canasta Básica Total (CBT) que en junio alcanzaba a $ 873.168, para una pareja con dos niños de seis y ocho años.
El mismo estudio de la UCA asegura que unos 7,8 millones de personas están en un estado de pobreza extrema o indigencia, por debajo de la canasta básica alimentaria (CBA) que en el sexto mes de este año ascendía a $ 393.319 para el mismo grupo social.
A pesas de estos números, el Gobierno se mantiene con buena imagen. Algo cambió en la Argentina. Milei antes de asumir dijo que iba a ajustar, que iba a quitar subsidios y que también iba a recortar los gastos del Estado. Tal vez, el ajuste pasó a ser popular.