Argentina atraviesa un momento clave en su historia. Tras décadas de políticas que frenaron nuestro crecimiento, hoy enfrentamos el desafío de transformar de raíz el modelo económico y político de nuestro país. Con la reciente asunción de Javier Milei como Presidente, no solo se busca terminar con los privilegios de la casta política que parasitó a este país en cientos de los rincones que conforman al Estado, sino también liberar el potencial económico de la Argentina.
Este nuevo paradigma de libertad económica plantea oportunidades concretas para sectores clave como la tecnología. En un contexto de crisis económica y desafíos globales, la industria tecnológica ha demostrado ser un motor de crecimiento y generación de empleo, y bajo el liderazgo del actual Presidente, se potenciarán aún más con políticas que favorecen la inversión y la competitividad.
El ecosistema tecnológico en la Ciudad de Buenos Aires ha mostrado un crecimiento sostenido, especialmente en áreas como las fintech, que han posicionado a Argentina como un líder regional. En 2023, Buenos Aires concentró más del 60% de las fintech del país, generando empleo de alta calidad y proyectándose como un hub de innovación en Latinoamérica. Este crecimiento es una prueba del enorme potencial que tiene la Ciudad para ser un polo de desarrollo tecnológico, siempre y cuando se eliminen las trabas burocráticas y se incentiven las inversiones.
Dos iniciativas clave del nuevo gobierno son el Régimen de Grandes Inversiones (RIGI) y el Pacto Fiscal, que ofrecen a la Ciudad oportunidades únicas para impulsar aún más su desarrollo tecnológico.
El RIGI, diseñado para atraer inversiones a gran escala, proporciona reglas claras y estabilidad jurídica para proyectos que superen los u$s200 millones. Sectores como la tecnología se verán beneficiados al atraer inversiones tanto nacionales como extranjeras, promoviendo la creación de empleos y fortaleciendo toda la cadena productiva local. Con incentivos como exenciones fiscales y seguridad jurídica, Buenos Aires podrá captar grandes proyectos en software, inteligencia artificial y desarrollo de fintechs.
El Pacto Fiscal, por su parte, incluye una propuesta de Regularización de Activos que permite a los porteños y residentes de la Ciudad de Buenos Aires blanquear bienes y activos adquiridos en el país y en el exterior. Para maximizar el impacto de esta medida, es fundamental que la Ciudad implemente una exención de impuestos locales para quienes se adhieran a esta regularización. Este incentivo, sumado a las políticas nacionales, permitirá inyectar nuevos fondos en el mercado, facilitando el financiamiento para startups y proyectos tecnológicos. A medida que estos capitales ingresen formalmente en la economía, el sector tecnológico tendrá acceso a mayores recursos para su expansión y consolidación.
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La Ciudad de Buenos Aires tiene una oportunidad histórica para consolidarse como el epicentro del desarrollo tecnológico en Argentina y la región. Adherir a las políticas propuestas por el gobierno nacional, como el RIGI y la exención de impuestos locales a aquellos que regularicen sus activos, permitirá aprovechar al máximo el potencial económico que hoy yace dormido. Desde La Libertad Avanza, hemos presentado ambos proyectos de ley (adhesión al RIGI y exención) que aún siguen sin ser tratados por la Legislatura.
Seguiremos impulsando las normativas necesarias para que estos beneficios lleguen a todos los porteños. Buenos Aires puede ser la capital de la innovación y la libertad en América latina. La senda normativa de la libertad y la desregulación económica ya ha sido allanada por el Presidente. Es momento de subirse.