La posibilidad de que se convoque a un nuevo paro de colectivos a nivel nacional sigue latente. Tras la conciliación obligatoria que dictó la Secretaría de Trabajo la semana pasada, y que desactivó una medida de fuerza por 48 horas, los representantes de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) volverán a reunirse este jueves con los empresarios para destrabar la negociación paritaria.
Pese a que la intención de las partes es cerrar un acuerdo cuanto antes y evitar la paralización de los servicios, el panorama no es para nada alentador. A horas de la nueva audiencia, Luciano Fusaro, titular de la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA) afirmó en diálogo con El Cronista que la situación es “complicada”.
“Seguimos trabajando con los colegas de las otras cámaras para ver qué ofrecimiento podemos hacer, pero el panorama es complicado, porque según los números que hicimos, si no hay un aumento de tarifas se nos va a hacer muy difícil llegar a un acuerdo”, señaló Fusaro.
Lejos aún de los números que pusieron sobre la mesa los representantes de los choferes, los empresarios mantendrán reuniones hasta último momento para ver qué incremento salarial ofrecer, aunque son pesimistas respecto a la respuesta que pueden llegar a obtener.
“La verdad es que no tenemos claro qué va a pasar, probablemente a la mañana nos reunamos para terminar de definir una propuesta y ver qué podemos ofrecer a la tarde”, explicó Fusaro.
Desde la UTA reclaman una recomposición que lleve el salario básico conformado para agosto a $1.160.000, en septiembre a $1.200.600 y el de octubre a $1.242.621. En tanto, para noviembre reclaman un piso de $1.283.627 y de $1.322.136 para diciembre.
El espacio sindical aseguran que, por el momento, las empresas “no han traído un ofrecimiento salarial conforme a lo solicitado”.
Mientras tanto rige la conciliación obligatoria que desde Trabajo dictaron el pasado viernes 27 de septiembre y que tiene vigencia por 15 días, una medida que le da un “respiro” a la parte empresarial.
“La conciliación obligatoria evita que el gremio tome medidas de fuerza por dos semanas, eso es lo único concreto al día de hoy. Nosotros vamos a ver qué estrategia podemos seguir con los números que tenemos, y esperemos que la UTA lo acepte”, manifestó Fusaro.
Sin embargo, el titular de la AAETA da casi por descartado que este jueves se rubrique un entendimiento.
“La verdad que que son varios los pasos que se tienen que dar y no sabemos que definición puede tomar el gremio, pero con la situación actual, veo muy complejo que mañana podamos llegar a una solución”, se sinceró Fusaro.
Pensando en lo que podría llegar a suceder cuando venza la conciliación, existe la posibilidad de que en la semana del 14 de octubre tenga lugar un paro de colectivos por 72 horas.
Es que a la medida de 48 horas que la UTA ya intentó llevar adelante esta semana, y con la que volvería a insistir a partir de esa fecha si no consigue el aumento requerido, se sumaría un paro total de transporte el día 17 de octubre, impulsado por la denominada Mesa Nacional de Transporte.
La Mesa Nacional de Transporte analiza un paro a nivel nacional
En paralelo, la Mesa Nacional del Transporte le puso fecha a una posible nueva medida de fuerza en el sector que fue ratificada por la Unión Tranviarios Automotor (UTA) y que derivaría en un otro paro total de colectivos, además de paralizar el servicio de trenes, aviones y camiones.
La medida de fuerza se realiza luego de haber declarado “el estado de alerta y movilización” por parte de los gremios del sector, en repudio a distintas medidas del Gobierno nacional.
La vuelta del impuesto a las Ganancias para la cuarta categoría, la declaración del servicio aeronáutico como esencial (que en la práctica implica una limitación al derecho a huelga) y el conflicto salarial en Aerolíneas Argentinas, son algunos de los puntos que rechazan los sindicatos del sector.
Según fuentes gremiales, el paro de transporte sería el próximo 17 de octubre, coincidente con el Día de la Lealtad peronista.
Sin embargo, está previsto que previamente se realice un plenario de todos los gremios el 8 de octubre, cuando se ratificará la convocatoria a la medida de fuerza.
Al ser de alcance nacional, la medida afectaría a todas las líneas de colectivo del país, y lo mismo sucederá con los servicios de trenes, subte, aviones y camiones.