Pedro Alfonso y Paula Chaves son una pareja muy unida, acostumbrada a hacer todo en equipo. Sin embargo, en estos días pusieron una distancia entre ellos, porque Paula se fue de vacaciones a Miami con sus hijos y con Brenda Gandini.
Así, mientras ella la pasa bomba en la playa, a Pedro le tocó lo que nunca: disfrutar solo y a sus anchas de su casa, con la posibilidad de manejarse a su antojo y relajar, capaz, algunas cuestiones de orden y limpieza que, de estar Paula, como buena virgniana, jamás se aflojan.
Sin embargo, Peter tuvo una revelación: a pesar de que su esposa no esté, él adoptó todas sus costumbres y hasta “manías”. “Invité a mis amigos para ver el partido y empecé a hacer cosas que no hago nunca, puse posavasos, ´cuidado con las migas´… Me trasformé en mi mujer”.
“Casi les hago sacarse las zapatillas, me di cuenta en un momento que ocupé ese rol de Paula”, señaló Alfonso, quien dijo que no había pasado tanto tiempo separado de su pareja y sus hijos, y agregó un dato de índole personal “Me gusta bañarme, lo disfruto”.
PAULA CHAVES REVELÓ CÓMO “MANIPULA” A PEDRO ALFONSO
“¿Sentís que Pedro es pollerudo?”, le preguntaron a Paula Chaves en una reciente visita a Bondi Live. Ante esta polémica consulta sobre su marido, ella respondió. “Durante estos 10 años de matrimonio, construyó un personaje de pollerudo sin serlo”.
“No es pollerudo, pero sé cómo trabajar y manipular su psiquis”, aseguró Paula, y explicó: “O sea, yo estoy tirada en la cama y sé perfectamente cómo decir ´me muero por una banana con dulce de leche y un vaso con agua´, sé cuándo tirarlo y en qué momento indicado para que él solo pueda ir a buscarla sin la necesidad de yo tener que ir a rogarle”.