Reiterancia. Ya tiene otras 18 causas y ahora fue detenido por robar en una farmacia junto a dos cómplices

La Policía de la Ciudad detuvo a tres ladrones mientras viajaban en un colectivo de la línea 9 por el carril del Metrobús de la 9 de Julio, después de haber roto la vidriera de un local para robar objetos de su interior.

Lo insólito es que uno de ellos ya había sido arrestado 18 veces, motivo por el cual las máximas autoridades porteñas volvieron a poner el foco sobre la necesidad de que el Congreso sancione de forma urgente una ley de reiterancia para evitar la “puerta giratoria” que habilita la excarcelación de los delincuentes por parte de la Justicia.

El hecho ocurrió en la madrugada de este domingo, cuando efectivos de la División Avenidas Céntricas de la Policía de la Ciudad fueron alertados por el Centro de Monitoreo Urbano (CMU) sobre tres ladrones que habían cometido un robo en Perú al 400.

Nefler, Arismendi y Gómez, detenidos por robar en San Telmo

Gracias a las características físicas y de vestimenta aportadas por el CMU, los efectivos dieron con los delincuentes a bordo de un colectivo en 9 de Julio y Córdoba. Tenían consigo los elementos robados, que fueron recuperados.

“Cerca de la mitad de los hechos delictivos registrados en la ciudad los cometen delincuentes reincidentes. La ciudad segura y ordenada que estamos construyendo con más presencia policial en las calles necesita dejar atrás definitivamente la lógica judicial garantista que libera delincuentes, por eso es indispensable una ley de reiterancia a nivel nacional”, dijo el jefe de gobierno, Jorge Macri. Hace dos meses, la Legislatura porteña aprobó un proyecto en ese sentido.

Por su parte, el ministro de Seguridad de la ciudad, Waldo Wolff, sostuvo: “Es imperioso que se trate una ley de reiterancia a nivel nacional; tenemos que darle las herramientas a la Justicia para que estos delincuentes entren y no salgan más”.

Además, sostuvo: “Hoy detuvimos por vez número 19 a uno de estos delincuentes. No le queda delito por cometer. En la ciudad, el que roba va preso y lo vamos a agarrar las veces que haga falta, pero hay que dar este debate cuanto antes: ley de reiterancia a nivel nacional y que se termine la puerta giratoria”.

Los tres ladrones detenidos tienen antecedentes, pero uno de ellos, Bruno Daniel Arismendi, de 22 años, cuenta con de 18 causas desde 2019 hasta la fecha, entre las que se encuentran delitos de robo, tentativa de robo, lesiones, atentado contra la autoridad, hurto y hasta una denuncia de abuso sexual simple.

Otro de los delincuentes –Dylan Javier Gómez, de 18 años– cuenta también con tres detenciones este año, por robo, tentativa de robo y daño agravado; el restante, Alexis Sebastián Nefler, de 25, tiene antecedentes por infracción a la Ley de Estupefacientes.

En la causa interviene el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N°34, a cargo de la jueza Laura Bruniard, que labró actuaciones por el delito de “robo en poblado y en banda” e indagará a los detenidos en las próximas horas.

El proyecto aprobado en la Ciudad

Hace dos meses, la Legislatura porteña aprobó un proyecto sobre el tema. Los principales puntos de la Ley de Reiterancia son.

-Los tribunales que dicten sentencia condenatoria deberán comunicar su resolución a la Dirección Nacional de Migraciones cuando se trate de personas extranjeras.

-En los allanamientos, ante el pedido fundamentado del fiscal, el Tribunal podrá ordenar, por auto, el ingreso y o el registro de ese lugar. En este sentido, señala que en casos graves y/o urgentes el auto se podrá adelantar por cualquier medio; el fiscal autorizado por el juez podrá disponer de la fuerza pública.

Allanamientos de urgencia: dispone que la policía puede allanar sin previa orden jurisdiccional en casos de incendio, explosión, inundación o cualquier situación que amenace la vida de los habitantes o la propiedad; o en casos que se denuncie que una o más personas extrañas fueron vistas “con indicios manifiestos de comisión de un delito; cuando se introduzca en una casa o local algún imputado de delito a quien se persigue para su aprehensión; cuando se escuchen voces que anuncien que se está cometiendo un delito o pidan socorro; o cuando haya sospechas fundadas de que en una casa o local se encuentra la víctima de una privación ilegal de la libertad, un niño, niña o adolescente, o una víctima de violencia de género y corra peligro inminente su vida o integridad física.

Peligro de fuga: se determina cuando las circunstancias permitan sospechar que puede existir debido a facilidades para abandonar el país o permanecer oculto, por la magnitud de la pena que podría llegarse a imponerse o por el comportamiento del imputado durante el proceso.