Sandra Priore y Luca Figurelli lideraron una alianza dentro de la casa de Gran Hermano para ir en contra de los participantes nuevos. Su idea fue elaborar estrategias que los favorecieran en las próximas nominaciones. “Hay que hacer una buena jugada porque en placa negativa nos hacen mier...”, comentó Luca. Lourdes Ciccarone coincidió con él y agregó: “Lo único bueno es que su líder es viejo”, haciendo referencia a Selva Pérez.
La pescadera quiso convencer a Saif Yousef y Lorenzo de Zuani de unirse al grupo original. Pensó que el salteño no tenía tanta intención de jugar con los recién llegados. Mientras tanto, Juan Pablo de Vigili se ofreció a ser un “caballo de Troya” para espiar a los nuevos y traer información. “El choque no sirve. Divide y reinarás”, opinó el correntino.
La llegada de los nuevos participantes generó tensión en la casa. Los originales se sintieron invadidos y molestos con los cambios en la convivencia. “No tengo ni ganas de compartir la mesa con esta gente. Abrís la heladera y hay olor porque no le ponen papel film a los bowls. Son cosas básicas de la vida. Nosotros antes estábamos bien. El baño no estaba tan sucio”, se quejó Lourdes.
Martina Pereyra sumó otro reclamo sobre la falta de limpieza. “También dejan los saquitos de té sobre la mesa”, comentó con fastidio. Ante esta situación, Lourdes decidió reunir a todos en la cocina para hablar sobre el orden en la casa.
EL CRUCE ENTRE SANDRA Y SELVA
“Acá no estamos hablando de juego ni de estrategias, sino de bases de convivencia. Nosotros cada vez que íbamos al baño, el baño estaba limpio. Llegaron ustedes y se volvió a hacer una mugre”, les dijo sin vueltas. Selva Pérez, quien ya había discutido con Sandra, no se quedó callada. “Tampoco es que esto era un oasis. Cuando entramos, el baño estaba detonado”, respondió con firmeza.
Sandra, molesta por el comentario, se defendió de inmediato. “No, disculpame, yo limpié el baño antes de que ustedes llegaran. Así que estás equivocada”, contestó con tono serio, dejando en claro que no pensaba dejarse intimidar.