La Reserva Federal bajó la tasa de interés ayer 50 puntos básicos. Si bien esto pudo ser interpretado como una señal de alerta, la Fed proyecta un aterrizaja suave. El mercado festeja y las acciones se disparan.
Los bonos argentinos acompañan la tendencia alcista de los mercados globales.
Apertura alcista
Las acciones en Wall Street se disparan el jueves, luego de que la Reserva Federal baje la tasa de interés ayer 50 puntos básicos.
El Dow Jones sube 1,1%, mientras que el S&P500 avanza 1,6%. Por su parte, el Nasdaq registra ganancias de 2%.
El miércoles, la Reserva Federal redujo los tipos en 50 puntos básicos, siendo la primera baja de tasas por primera vez en más de cuatro años.
Generalmente la Fed se mueve de a 25 puntos básicos, sin embargo, ayer decidió recortar la tasa de manera más agresiva, es decir, de 50 puntos básicos.
Pese a ello, el presidente de la Fed aseguró a los inversores que la fuerte reducción de la tasa era una medida para salvaguardar una economía resistente, en lugar de una respuesta de emergencia a la reciente debilidad del mercado laboral.
La votación sólo tuvo un voto a favor de un recorte de 25 bps, con el resto del FOMC votando en bloque por la baja de 50 bps.
Con el actual recorte culminó el tercer ciclo de subas de tasas más duradero (por detrás de 2015 y 2004) y el cuarto más agresivo (por detrás de 1980, 1977 y 1972) de las últimas cinco décadas.
Además, la decisión de ayer termina de confirmar que se dio el escenario de tasas más altas por más tiempo (higher for longer), ya que transcurrieron 421 días (14 meses) desde la última suba de tasas.
Es un lapso que duplica al tiempo promedio histórico que transcurre entre la última suba de tasas de un ciclo alcista y la primera baja de un ciclo bajista, el cual es de 7-8 meses.
Consumado el recorte con una magnitud en torno a la descontada y cerrado ese debate, el mercado se concentró en el wording, las proyecciones macroeconómicas y, más que nada, el dot plot (diagrama de puntos sobre el futuro de las tasas de interés).
El Dot Plot de la Fed indicó una reducción de las tasas de mediano plazo de manera más suave respecto de las que esperaba ver el mercado.
Las proyecciones económicas de la Fed, que arrojaron un Dot Plot con recortas por 50pbs adicionales en lo que resta del año, y con 100pbs para todo 2025, algo menos que lo que el mercado descuenta hoy en los futuros de tasas de la Fed.
Esto dio la pauta de que la Fed no ve la necesidad de realizar recortes mucho mas agresivos, por lo que no está viendo una crisis en el mediano plazo.
Esto generó optimismo en el mercado y las acciones reaccionan al alza.
Es decir, el rally en el mercado se da gracias que los inversores asignan mayores probabilidades de que la economía de EEUU se dirija hacia un aterrizaje suave, el cual parecería ser el escenario base de la Fed.
Hacia adelante, el grado en que se cumplan las previsiones de Powell probablemente sea un factor clave en la trayectoria de las acciones y los bonos durante el resto de 2024.
Por otro lado, revisaron marginalmente a la baja la proyección de crecimiento de PBI de 2024 a 2,0% desde 2,1% a la vez que esperan también una inflación PCE núcleo menor (2,6% desde 2,8%).
En tanto, fue revisada al alza la proyección de tasa de desempleo a 4,4% desde 4,0% en la proyección de junio.
Los analistas de Delphos Investments señalaron que el FOMC de la Fed y Powell comunicaron una postura flexible en el corto plazo, en pos de sus objetivos rectores de largo plazo.
“La inflación bajó con crecientes probabilidades de encaminarse al 2%, y la economía se enfrió, pero está en buenas condiciones. Estas dinámicas dejan balanceados los riesgos percibidos sobre la inflación y el empleo, motivando que la Fed busque una rápida normalización de su política monetaria. Ayer bajó fuerte la tasa, y proyectó su más rápida convergencia al nivel apropiado de largo plazo”, explicaron.
Además, agregaron que la Fed bajó 50 bps mostrando profesionalismo y sin alterar los mercados.
“En el largo plazo se mandarán los fundamentos, que en el presente no son congruentes con una recesión. Mientras tanto, encontramos central la tendencia que puedan mantener el dólar, y monedas como el yen japonés o el yuan chino, además de las de nuestra región”, dijeron.
Los analistas de Facimex Valores coincidieron en que mercado es un poco más agresivo en cuanto al futuro de las bajas de tasas, respecto de la Fed, ya que espera que los recortes totalicen los 200pbs hasta fines de 2025.
“La Fed ve tasas más bajas en el corto plazo, pero tasas más altas en el largo plazo. Proyecta la tasa en 3,25-3,50% a fines de 2025, (en junio la estimaba en 4-4,25%). Esta revisión a la baja se da en un marco en el que la Fed revisó al alza sus proyecciones de desempleo y a la baja sus proyecciones de inflación. No obstante, la Fed revisó al alza la tasa de largo plazo por tercer trimestre consecutivo y ahora se ubica en 2,9%, nivel que se alcanzaría en 2026”, indicaron.
Impacto local
Los bonos locales acompañan el buen humor global.
Los títulos del tramo corto registran avances de 0,67% y 0,69%, en los bonos a 2029 y 2030. Por su parte, en el extremo medio, los bonos a 2035 y 2038 avanzan 0,97% y 0,75% respectivamente.
Finalmente, los bonos más largos ganan 0,85% y 0,95% respectivamente.
Para los analistas de Facimex Valores, se da un viento de cola para la Argentina.
“Argentina podría verse beneficiada en varios frentes ante un escenario de baja de tasas como el actual. Se debilitará el dólar a nivel global, lo que brindará mayor margen en el manejo de la política cambiaria. Los precios de commodities tomarán impulso, generando cierto alivio sobre la cuenta corriente en un contexto de apreciación del tipo de cambio real y de cara a un trimestre desafiante para el BCRA”, indicaron.
Además, remarcaron que esta dinámica permitirá profundizar la compresión del riesgo país al aumentar el apetito por deuda emergente, sin perder de vista que el programa económico exige retornar a los mercados de capitales globales entre 2025 y 2026.
Los analistas de Puente consideran que, en cuanto a su impacto local, el mercado ya se había anticipado a esta noticia.
“Los precios de los bonos soberanos argentinos han aumentado siete dólares desde principios de agosto, y consideramos que el driver detrás de esto fue mayormente externo, ya que se evidenció un comportamiento similar en soberanos comparables, sin haber demasiado driver a nivel local”, dijeron. De cualquier manera, tras el anuncio los soberanos aumentaron otros cincuenta centavos en promedio y alcanzaron el nivel de abril, que había sido su máximo valor desde la reestructuración de 2020.
“A mediano plazo, creemos que un ciclo más expansivo de tasas por parte de la Reserva Federal puede ayudar al objetivo del Gobierno de retomar el acceso a los mercados internacionales, en la medida en que éste derive en un mayor apetito por activos emergentes”, comentaron desde Puente.
Florencia Calvente, head de research de Conosur Investments, remarcó que ese escenario que hoy está incluido en los precios es el mejor de los mundos para Argentina, y para los activos emergentes en general.
“Hoy, con un Gobierno que sostiene firme su postura fiscal y que mantiene el apoyo social, vemos mayor upside en los bonos, y seguimos cómodos con nuestra posición en soberanos en dólares, principalmente GD35, GD30 y Bopreal 2026 (BCRA), pensando en una eventual mejora del crédito soberano”, detalló Calvente.