
Tras sus primeras horas de convivencia en Honduras, Terelu Campos hace balance de esta nueva aventura y lo hace reconociendo que su paso por ‘Supervivientes’ está siendo un verdadero reto para ella a pesar de los contratiempos con los que se pueda encontrar. Feliz de poder afrontar este concurso, Terelu reconocía ante Sandra Barneda que, a diferencia de sus compañeros, ella desea que llegue la noche. “Yo debo ser como el mundo al revés. Todo el mundo teme la noche y yo quiero que llegue la noche. Así sé que ha pasado un día más” explicaba.
Asegurando que ella tampoco dormía bien en Madrid, Terelu podía visionar unas imágenes en las que se le ecuchaba roncar sin que ninguno de sus compañeros le llamase la atención ya que, según ella: “Son tan educados que no me han dicho nada”. Disfrutando al máximo de la experiencia y la convivencia con sus compañeros, Terelu tiene claro que no se pone niguna meta, solo disfrutar de la experiencia: “Yo no me pongo una meta de X días. Si me voy dentro de 4 o de 8 no me siento una fracasada. Tengo claro que no voy a dejar que nada ni nadie condicione lo que yo quiero hacer o hasta donde yo quiero llegar o mi cuerpo me acompañe a llegar. No voy a pensar en los días, me da lo mismo”.
Ya muy cómoda junto a sus compañeros, Terelu hablaba de su enfermedad y cómo al principio intentó ocultarla porque coincidió con la llegada de la Navidad. “Nunca me pregunté por qué me había tocado a mí, pero sí por qué me había salvado yo” reconocía ante sus compañeros. Emocionada desde plató, su hija Alejandra reconocía que estas palabras de su madre le han removido una etapa de su vida muy complicada para ella.