Este viernes por la mañana el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, fue internado en la clínica Sagrada Familia, del barrio porteño de Belgrano, por segunda vez en tres meses.
Desde el entorno del funcionario, de 74 años, buscaron relativizar la cuestión y aclararon que fue a realizarse estudios que tenía programados. Sin embargo, fuentes extraoficiales del Gobierno describieron un cuadro más complejo de origen neurológico.
La noticia generó preocupación en la comitiva oficial que está en Montevideo, Uruguay, por la cumbre del Mercosur, dado que en septiembre, el funcionario de Javier Milei había sido internado de urgencia por un cuadro gastrointestinal que lo llevó a un desmayo. Según explicaron fuentes del entorno de Francos a LA NACION, tenía chequeos programados que debieron adelantarse por temas de agenda.
Si bien en un principio habían asegurado que luego de terminar los estudios el funcionario volvería a su casa, por la tarde su vicejefe de Gabinete, y mano derecha, Lisandro Catalán, quien arribó esta tarde a la clínica para visitarlo, sostuvo que los médicos están analizando la posibilidad de que Francos permanezca esta noche en la clínica.
En ese sentido, Catalán deslizó que es probable que el jefe de Gabinete no sea dado de alta hoy, ya el chequeo de rutina al que fue sometido consta de “distintos procedimientos”. De todas formas, aclaró que Francos se encuentra “muy bien”. Y al respecto concluyó: “Está perfecto, estuvimos hablando de la agenda parlamentaria”.
Según señalaron fuentes a LA NACION durante la noche, Francos recibirá el alta el sábado al mediodía y podrá retirarse de la clínica.
Parte médico
Pasada el mediodía, desde La Sagrada Familia emitieron el primer parte médico del jefe de Gabinete. “Ingresó a esta clínica como parte del control clínico y neurológico regular, a cargo de su médico de cabecera, Pedro Lylyk”, indicaron, a la vez que precisaron que a Francos le hicieron exámenes clínicos y de laboratorio, una tomografía computada, una resonancia magnética nuclear y un electroencefalograma.
“El señor ministro se encuentra lúcido, estable. Examen clínico, cardiológico y neurológico normales, en espera de completar el resto de los estudios de rutina”, detallaron.
Milei, en Montevideo
Las versiones sobre la salud de Francos llegaron luego de conocerse las primeras imágenes de Milei en Montevideo, donde fue a participar del encuentro regional en el que propondrá avanzar con tratados de libre comercio por fuera del bloque. Al mandatario se lo vio compartir la apertura junto al anfitrión, el presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, y otros jefes de Estado de la región como Santiago Peña, de Paraguay; y Luiz Inácio “Lula” da Silva, de Brasil, con quien mantiene una relación tensa.
Francos es una de las personas de mayor confianza de Milei. Ambos se conocen desde que trabajaron en Corporación América, la empresa de Eduardo Eurnekian. Pata política del Gobierno y articulador de las relaciones con los aliados, el funcionario es uno de los más experimentados dentro de esta gestión y fue elegido como jefe de Gabinete cuando salió expulsado Nicolás Posse, también ex Corporación América. Antes fue ministro del Interior, puesto que recayó en su ladero Lisandro Catalán.
La internación anterior
A principios de septiembre, el jefe de Gabinete fue internado de urgencia cuando un cuadro gastrointestinal agudo le ocasionó una lipotimia. En ese entonces, le hicieron los primeros auxilios en el Hospital de Pacheco y, tras quedar estabilizado, lo derivaron a la Sagrada Familia. Desde el instituto privado precisaron en su momento que el funcionario pasó por un “cuadro sincopal” con pérdida de conocimiento. Sin embargo, su recuperación fue rápida y, tras tener el alta, volvió a sus tareas habituales en la Casa Rosada.